Desde el origen tuvo una inversión inicial de 1,400 millones de dólares.
La operación que logró Pemex con la estadounidense deja a la petrolera mexicana con la propiedad del yacimiento y al finalizar el contrato será propietario del total de la infraestructura.
“Este acuerdo permitirá que en el primer trimestre de 2024 se inicie la producción de este hidrocarburo. Lakach representa una reserva de alrededor de 900 mil millones de pies cúbicos, lo que significa una producción promedio de 300 millones diarios en un horizonte de 10 años”, expuso.
También se firmó un contrato de comercialización en la cual la estatal nacional venderá 190 millones de pies cúbicos diarios a New Fortress Energy y los restantes 110 millones se ingresarán a territorio mexicano para el consumo local.
“Este acto representa no solo el rescate de una inversión que se encontraba hundida para PEMEX, sino que se convierte en un negocio que le traerá beneficios económicos al país”, señaló Pemex.
La empresa a cargo de Octavio Romero Oropeza expuso que en la periferia del campo Lakach se encuentran otros yacimientos con una reserva tres veces mayor y que pueden hacer sinergia, por lo que autoridades de Pemex iniciarán una evaluación para su más eficiente desarrollo.