Una advertencia
El paro de Kentucky es una advertencia para Stellantis y General Motors, cuyas ofertas salariales y de prestaciones son inferiores a las de Ford, según los resúmenes publicados por las automotrices y la UAW.
Algunos analistas consideraron que la decisión de Fain de cerrar la planta de camiones de Ford en Kentucky, donde se fabrican las camionetas Super Duty y los todoterrenos Lincoln Navigator, era una señal de que se podría estar asistiendo al final de la ronda de paros coordinados contra los Tres de Detroit, que ya dura casi un mes.
"La presión siempre fue necesaria para forzar un acuerdo", escribió el analista de Evercore ISI Chris McNally en una nota el jueves.
Las acciones de Ford caían un 2.2%, a 11.98 dólares en las operaciones previas a la apertura de la sesión, mientras que las de GM bajaban ligeramente a 30.95 dólares.
"Esto pone a todo el mundo sobre aviso", dijo Sam Fiorani, vicepresidente de previsión global de vehículos de AutoForecast Solutions. "Si no han puesto nada nuevo sobre la mesa desde la semana pasada, GM y Stellantis deberían de estar preocupados".
Pérdidas millonarias
Los analistas de Wells Fargo estimaron que Ford perderá unos 150 millones de dólares semanales en ganancias subyacentes por la huelga en la planta de Kentucky.
"Creemos que esta escalada es una señal de que la UAW podría estar cerca de una propuesta de contrato con Ford en las próximas una a dos semanas", dijo Colin Langan, analista de Wells Fargo, en la nota.
Incluso con la huelga de 8,700 trabajadores de la planta de camiones de Ford en Kentucky, menos de una cuarta parte de los 150,000 trabajadores de la UAW de los tres fabricantes de automóviles de Detroit están en huelga. Sin embargo, miles más han sido despedidos de sus puestos de trabajo en operaciones que no están en huelga porque las automotrices dijeron que los paros hacían innecesario su trabajo.
Las automotrices de Detroit presentarán sus resultados financieros del tercer trimestre entre el 24 y el 31 de octubre, y la UAW podría usar los beneficios que se esperan para presionar a favor de un contrato más ventajoso.