La consultora proyecta que, al cierre de este año, los ingresos de las plataformas de streaming alcanzarán los 1,852 millones de dólares, un aumento del 17.2% con respecto a los 1,579 millones de dólares obtenidos en 2022. Contrariamente, el retorno de inversión se situará en un 17%, frente al 21% reportado el año anterior, marcando una disminución de cuatro puntos porcentuales. Este estudio pronostica una desaceleración continua en este segmento hasta 2027.
Fusiones, la tendencia
Las empresas que incursionan en el negocio del streaming implementan estrategias constantes para destacarse en la industria ante la creciente competencia. Una de las estrategias clave ha sido la adquisición de extensos catálogos audiovisuales para enriquecer sus plataformas, así como fusiones con grandes estudios audiovisuales para diversificar sus contenidos.
Por ejemplo, Warner Bros. se fusionó con Discovery el año pasado, dando origen a la nueva plataforma de streaming llamada Max, programada para llegar al país en el primer trimestre de 2024, con un costo de 43,000 millones de dólares. Además, ha logrado un acuerdo con el estudio A24 para incorporar sus películas a la plataforma HBO Max.
Disney también ha tomado medidas significativas, fusionando Star+ con Disney+ para operar como una sola plataforma y comenzando a integrar contenidos de Hulu en el catálogo de Disney.
Netflix, por su parte, ha optado por modificar parte de su modelo de monetización, dejando de permitir la compartición de cuentas entre usuarios para mejorar sus ingresos.
Adiós a la ‘burbuja pandémica’
A pesar de estas estrategias, el negocio de la industria del streaming no logra encontrar una trayectoria clara. Según Radamés Camargo, analista de la consultora The Ciu, las fusiones y la adición de contenidos premium no son suficientes para ser rentables. La dinámica social posterior a la pandemia ha llevado a los usuarios a volver a sus rutinas sociales anteriores, reduciendo gradualmente el tiempo dedicado a las plataformas de streaming en comparación con el periodo de trabajo desde casa. Además, las audiencias no están dispuestas a invertir grandes sumas de dinero en varias aplicaciones de video bajo demanda.
Camargo sugiere que las plataformas de streaming deben abandonar la mentalidad de la ‘burbuja pandémica’ y reconsiderar la exclusividad, volviendo a exhibir contenidos en otras ventanas como el cine para obtener resultados más favorables. Aunque las plataformas aún confían en el modelo de pago por ver, “está probando que no es tan exitoso para poder sostener a estas empresas, así como los niveles de inversión que requieren para generar contenidos premium”, asegura el experto.
En este momento, las empresas de la industria del streaming se encuentran en una encrucijada, ya que la fórmula del contenido exclusivo muestra signos de desgaste. Para evitar la desaparición o fusiones con otras plataformas, la solución a corto plazo podría ser regresar al modelo antiguo de la televisión, exhibiendo programación con mayores intervalos de publicidad, una opción que, aunque contradice el enfoque principal de diferenciación audiovisual, podría ayudar a equilibrar sus operaciones.