El plan de la farmacéutica en México refleja la transformación de la compañía a nivel global. En 2020, la división de medicamentos para la obesidad representó 4% de las ventas; para 2024, ya significaba 22.43%, lo que la convierte en el negocio de mayor dinamismo dentro de su portafolio.
El foco en la obesidad
Para sostener ese crecimiento, la empresa prepara el lanzamiento de un tratamiento oral para la obesidad, con la misma molécula activa del Ozempic. “Le damos prioridad a México, especialmente para el cuidado o la atención hacia la obesidad”, dice Finkel, sin dar más detalles del medicamento.
Sin embargo, no detalló si este desarrollo oral busca responder al uso extendido de Ozempic como tratamiento para bajar de peso. “La competencia es bienvenida”, se limitó a decir sobre la creciente oferta en este mercado. Otras farmacéuticas como Eli Lilly y Pfizer también tienen sus propios tratamientos.
La oportunidad es amplia. En México, alrededor de 37% de personas adultas padecen obesidad, condición que aumenta la probabilidad de desarrollar diabetes tipo 2, hipertensión arterial y problemas cardiovasculares. Solo en el sistema público de salud, hasta el segundo trimestre de 2025, se registraron 22,968 ingresos de pacientes con diabetes tipo 2.
El acceso a estos medicamentos plantea retos. Mientras el mercado privado ha sido la vía más utilizada por los pacientes, el público sigue siendo clave para ampliar la cobertura. “La semaglutida oral está disponible en el mercado privado y público, al igual que la semaglutida para la diabetes. Por lo tanto, nuestro objetivo a futuro es ofrecer aún más moléculas en el mercado público”, dijo Finkel.
El directivo asegura que México se ha convertido en un mercado donde la empresa ya negocia con el gobierno para ampliar la disponibilidad de tratamientos. “Si observamos la evolución de los medicamentos que tenemos disponibles, podemos ver la capacidad que tenemos para negociar con el gobierno y así facilitar el acceso a la innovación, cuando antes la disponibilidad era solo por el canal privado”, comenta.
Novo Nordisk no fabrica medicamentos en México, en línea con su estrategia de reducir costos operativos. Tras la eliminación en 2008 del requisito de tener plantas nacionales para vender al gobierno, la compañía encontró una puerta abierta para competir en el sector salud.
Al mismo tiempo, ha destinado alrededor de 850 millones de pesos en estudios en México. “Es un excelente lugar para realizar ensayos clínicos. Cada vez realizamos más estudios de moléculas en Dinamarca, que luego llevamos a cabo en ensayos clínicos de fase tres en México”, señala Finkel.
La apuesta por obesidad y diabetes se refleja también en los estados financieros. En 2024, la división de medicamentos para obesidad reportó un crecimiento de más del 50%, superando al de diabetes y enfermedades raras. En conjunto, la compañía alcanzó ingresos por 290,403 millones de coronas danesas (45,643.48 millones de dólares).
México, un motor de crecimiento
El motor de este crecimiento ha sido Ozempic, aprobado en Estados Unidos en 2017 y en Europa en 2018. Con él, Novo Nordisk alcanzó una cuota de mercado global del 33.7% en 2024, según datos de la empresa. “La semaglutida tiene el mayor crecimiento; sin embargo, contamos con otros fármacos que están para la insulina y para enfermedades raras como la hemofilia o trastornos del crecimiento”, dice Finkel.
El éxito también trajo desafíos. La alta demanda generó desabasto en 2024 y un auge en el mercado negro, alimentado por el uso del medicamento para bajar de peso. “No podemos tener el control de una distribución secundaria. Lo que sí es que queremos hacer énfasis en que el paciente debe de asistir con su doctor para que sea el que prescriba el medicamento y que éste se adquiera en una farmacia”, enfatiza el directivo.
Para atender la presión, Novo Nordisk invirtió 129,000 millones de coronas danesas (20,281.04 millones de dólares) en expansión de capacidad, que incluyó tres nuevas plantas y la ampliación de operaciones en Dinamarca, Francia, Brasil, China y Estados Unidos.
Los resultados ya se reflejan en su desempeño. En 2024, la farmacéutica reportó haber atendido a 45.2 millones de pacientes con enfermedades crónicas graves, y sus ganancias operativas crecieron 26%. “La demanda fue mucho mayor de lo que se esperaba, y ya está resuelto, el problema fue temporal”, asegura Finkel.
“Si vemos el cronograma hacia futuro, veremos que para diabetes vienen opciones que van a ser mejores que con propuestas de tratamientos semanales sin efectos secundarios. Para la obesidad van a hacer inyecciones y medicamentos orales y también vamos a comenzar con los medicamentos cardiometabólicos”, añade el ejecutivo.
Con el impulso de Ozempic y el desarrollo de nuevos tratamientos orales, Novo Nordisk busca consolidarse como la compañía farmacéutica líder en la atención a diabetes y obesidad en México, un mercado que se ha vuelto estratégico para la compañía en América Latina y que ya representa una cuarta parte de sus ventas regionales.