La semana de la moda de Nueva York dice adiós con estilo, al Bryant Park

Después de diecisiete años, el Mercedes Fashion Week NY cambia de sede. Se muda del Bryant Park al Lincoln Center. Este parque ha visto pasar a algunos de los diseñadores más importantes del mundo, así como a modelos y celebridades reconocidas porque han llevado mucho glamour a las “tents” (tiendas).
La nostalgia de dejar el espacio conocido es general, pero hay gran emoción de encontrarse con lo que está por llegar.
“Bryant Park ha sido (un lugar) maravilloso. Hemos tenido grandes momentos aquí, pero estamos emocionados por (ir al) Lincoln Center. Es el corazón de la cultura en Nueva York”, dijo Diane von Furstenberg –quien presentó el domingo pasado su colección Otoño-Invierno 2010– al Daily Front Row, el periódico del Fashion Week.
Así como Diane, Hervé Legér de la marca Max Azria también se despidió de la carpa con una colección que se llevó las palmas.
Basándose en su ya conocida silueta ceñida al cuerpo, el diseñador agregó detalles en metal, holanes y trenzados a la estructura de los vestidos con una construcción impresionante. Dentro de estos cortes futuristas predominaron el gris, el blanco, el negro y el beige.
Otros dos espectáculos dignos de ser mencionados fueron el de DKNY (Donna Karan New York) y Malandrino, ambos que se llevaron a cabo “offsite”, es decir, en locaciones fuera del Bryant Park.
El desfile de DKNY destacó por los estampados geométricos y el estilo ‘preppy’ dentro de una bodega en el West Village.
El de Malandrino, retomó la tendencia tribal de su colección Primavera-Verano 2010 e hizo gran énfasis en los accesorios.
Y para cerrar el día Custo Barcelona mostró pieles teñidas en tonos brillantes y estampados sicodélicos que ya lo caracterizan.