Lady Gaga no quiere sexo, y se opone a las drogas y a la Ley SB1070

De todas las razones para no tener sexo, Lady Gaga encontró una más.
“Me pasa algo muy extraño: si duermo con alguien, me va a quitar mi creatividad a través de mi vagina”, dijo Gaga a Vanity Fair en su número de septiembre.
Pero la estrella de 24 años de edad, que admitió que no confía en nadie, no está encontrando muchas oportunidades para que le roben de creatividad… al menos no últimamente.
“Estoy atraída a los malos romances”, dijo Gaga a la revista. “Mi canción, Bad Romance, se trata de si sigo ese tipo de relaciones o si dejo que me encuentren. Ahora vivo en celibato, y no tengo mucho tiempo para conocer a alguien”.
Gaga también habló con la revista sobre el uso de drogas, pues admitió que aunque “le aterroriza la heroína”, consume cocaína de vez en cuando. “Cuando digo que es algo ocasional, me refiero a que lo hago un par de veces al año”, aclaró Gaga, quizás para desasociar su uso de drogas actual con el del pasado.
Hubo una etapa de su vida en la que estaba “completamente loca”, dijo Gaga, y aunque Vanity Fair mencionó que había empleado drogas, Gaga no dio mayores especificaciones.
“Todo lo que voy a decir es que toqué fondo, y eso fue suficiente para enviar a una persona a la locura. Mi madre supo la verdad de eso un día, y gritó tan fuerte del otro lado del teléfono… es algo que nunca voy a olvidar”, recuerda Gaga.
Su madre llevo a rastras a la joven músico a la casa de su abuela de 82 años en West Virginia. Después de que Gaga lloró porque pensó que se trataba de una situación sin remedio, su abuela le dijo que la dejaría llorar unas horas más. Y después, cuando terminaron esas horas, “vas a dejar de llorar, te vas a recuperar y vas a regresar a Nueva York para ser un éxito”.
Podrá sonar inspirador, pero Gaga dijo rápidamente que ella no quería que sus fans pensaran que se trata de una pared necesaria en el camino al éxito.
“No quiero que mis fans crean que deben imitar a alguien o ser de esa forma”, dijo a la revista. “No quiero que piensen que deben hacer lo mismo para ser geniales. Eso quedó en el pasado, y fue un punto bajo que me llevó al desastre”.
Sin duda, la estrella pop está conciente de la influencia que tiene sobre sus seguidores, y recientemente explicó lo que ella pensaba que debían hacer en respuesta a la ley de migración de Arizona, la ley SB 1070.
Aunque Gaga realizó un concierto en Phoenix el domingo, en vez de reunirse con Sound Strike, habló del controversial problema. “Gracias por comprar un boleto para ver mi espectáculo. Arizona, esta noche quiero que se liberen, quiero que dejen ir todas sus inseguridades, quiero que rechacen a cualquier persona o ley que les haya hecho sentir que no pertenecen aquí”, dijo entre los aplausos del público.
“Me llamaron un par de rocanroleros importantes, grandes estrellas del pop y raperos, y me dijeron que querían que hiciera un boicot en Arizona, y yo les pregunté que si en realidad pensaban que nosotros íbamos a colapsar la economía en Arizona. Yo les voy a decir lo que tenemos que hacer con la SB 1070”, dijo.
La artista, que escribió en su brazo “Alto a la SB 1070”, dijo al público que debían ser activos, que debían protestar de forma activa. “No voy a cancelar mi presentación, yo me quedaré con ustedes y nos quedaremos juntos, y protestaremos pacíficamente en este estado. No tengan miedo, porque si no fuera por todos los inmigrantes, este país no tendría nada”.
El número de septiembre de Vanity Fair llegará a los puestos de revistas el martes 10 de agosto.