Dos décadas de identidades urbanas mexicanas en la obra de un fotógrafo

Jóvenes indígenas con vestimentas punk, cholos apuntando con una pistola directo hacia la cámara y graffiteros creando murales, han desfilado ante el lente del fotógrafo mexicano Federico Gama.

A lo largo de 20 años de carrera, Gama ha retratado a los jóvenes y sus diferentes formas de expresarse.

Inspirado en el popular barrio de Tacubaya, en la ciudad de México, donde pasó su juventud, Gama ha basado su trabajo en la vida en la Ciudad de México.

"Mi trabajo fotográfico parte de las preocupaciones que he tenido sobre la vida en la Ciudad de México y mis proyectos tienen continuidad: cada tema me lleva necesariamente a otro, nunca los agoto por completo, por el contrario los voy ampliando y con el tiempo terminan entrelazándose".

Esta semana, inicia en la capital mexicana la exhibición de una retrospectiva de este trabajo, que abarca diferentes etapas y temas: del movimiento estudiantil de 1986 al rock en español, de la cultura carcelaria al tatuaje, del cholismo chilango a la juventud urbana indígena, del graffiti a las fiestas tradicionales y de la marcha gay a las culturas juveniles en la Basílica de Guadalupe.

"Mis fotografías retratan la indumentaria o look, documento lo que la forma de vestir expresa con la idea de establecer puentes simbólicos o acceder de manera visual a otros grupos que por desconocimiento discriminamos, marginamos o rechazamos porque no son 'iguales a nosotros' o porque no los entendemos" añadió el fotógrafo. 

Este miércoles se inauguró ¿Que veinte años no es nada? en el Claustro de Sor Juana, en la Ciudad de México.