Alergia irracional de Hollywood hacia las películas 'negras'
¿Quién habría imaginado que 70 años después de que los pilotos afroamericanos tuvieron que trabajar duro para superar los prejuicios de los blancos en la armada de Estados Unidos, y de que la nación tuvo su primer comandante en jefe afroamericano, los hombres conocidos como Tuskegee Airmen todavía estarían batallando con una institución arraigada de agentes de poder blancos , todo ello por el color de su piel?
Es posible que muchos de ustedes hayan visto los llamativos anuncios de publicidad de Red Tails, la gran película que narra la historia asombrosa y verdadera de héroes estadounidenses reales: los pilotos afroamericanos que viajaron al extranjero en la Segunda Guerra Mundial para luchar por la libertad y la democracia que no podían disfrutar en casa.
La película se estrenará este 20 de enero en los cines de todo Estados Unidos, y para su productor, George Lucas, ha sido una odisea de 23 años.
Podría pensarse que alguien considerado uno de los jugadores más poderosos de Hollywood, un hombre que ha ganado miles de millones de dólares con éxitos de taquilla como las franquicias Indiana Jones y Star Wars, habría sido capaz de hacer que Red Tails fuera aprobada sin ningún titubeo. Sin embargo, muchos afroamericanos siempre han sabido que en Hollywood, el color de su piel —o el de las personas en la historia que quieres contar— a menudo es víctima del encasillamiento racial.
Ah, claro, Hollywood es visto como un bastión liberal donde la gente habla de la igualdad y apoya los derechos civiles, pero cuando se trata de contar historias que tienen un reparto mayormente afroamericano, Hollywood bien podría volver a la década de los 50 y los 60, y colocar letreros que digan 'Sólo para blancos'.
Cuando Lucas se acercó a los grandes estudios de Hollywood para negociar su respaldo a Red Tails, le dijeron: Gracias, pero no gracias.
“No hay papeles principales blancos en ella en absoluto... se la mostré a todos ellos y me dijeron que no, no sabemos cómo comercializar una película como ésta”, dijo Lucas a Jon Stewart en The Daily Show.
Vamos a contraponer eso en contra de otros hechos:
- En 2008, 69 millones de personas votaron por Barack Hussein Obama como presidente de Estados Unidos.
- La mujer más comentada en Estados Unidos durante los últimos 25 años fue Oprah Winfrey, que redefinió el género del talk show.
- ¿Qué deportista tiene la camiseta más vendida en la NBA? LeBron James.
- ¿Quién es considerado el actor más taquillero? Samuel L. Jackson.
- El mayor artista del mundo del espectáculo de la historia es probablemente Michael Jackson.
- ¿El mejor golfista del mundo? Tiger Woods .
- ¿Las jugadoras más dominantes en el tenis femenino? Venus y Serena Williams.
- ¿La mayor cantante hoy en día? Beyonce.
- Y el hip-hop, un producto de la cultura afroamericana, es un fenómeno en todo el mundo. Y 80% de los consumidores de música hip-hop en Estados Unidos son niños blancos.
Así que los blancos en todo Estados Unidos han llegado a aceptar a los afroamericanos en una variedad de medios públicos, pero Hollywood aún pretende decirnos que, de algún modo, ver afroamericanos en la pantalla grande es un anatema para sus valores.
Tal vez lo que nadie en Hollywood quiere aceptar es que, en muchos aspectos, es una sociedad de mente cerrada en la que es difícil encontrar a afroamericanos en posiciones de poder real.
En la historia de Hollywood, ningún afroamericano ha dirigido un estudio importante. Sí, hemos visto a presidentes ejecutivos afroamericanos en American Express, Time Warner, Xerox, Merrill Lynch, Symantec y otras compañías importantes, pero las puertas de la oportunidad están cerradas en Hollywood.
¿Significa esto que los afroamericanos no son contratados? No. Pero lo son en puestos de bajo nivel en el que desesperadamente pelean una buena batalla, a sabiendas de que nunca subirán a la cima de la cadena alimentaria en Hollywood.
Parte del problema de Hollywood es que al mirar una película que tiene, como Red Tails, un elenco en su mayoría afroamericano, se presenta como una película 'negra'.
Red Tails no es una película negra. Es una película de guerra. Es una película de acción. Es una historia de verdaderos héroes estadounidenses que superan grandes obstáculos para alcanzar el éxito. Ésa fue la conclusión del entrenador en jefe de futbol americano de Alabama, Nick Saban, quien mostró la película a su equipo la noche antes de que se apalearan a LSU por el título BCS nacional.
¿Concluyó Saban que era una película negra? No, en absoluto, y le dio un respaldo rotundo.
Esta batalla racial puede ser nueva para George Lucas, pero para los afroamericanos, ha sido una batalla larga y dolorosa.
Y no sucede sólo en los grandes estudios.
The Weinstein Co. produjo The Hurricane Season, una película de basquetbol acerca de dos equipos que se unen ante el paso del huracán Katrina para ganar el campeonato del estado de Louisiana. Sin embargo, la película fue lanzada directamente en DVD, lo que enfureció al actor principal Forest Whitaker, y a otros en la película, incluyendo a Taraji Henson, Courtney B. Vance, Isaiah Washington y el rapero Bow Wow.
¿La excusa dada a los actores? The Weinstein Co., dijo que no sabía cómo comercializar la película. De verdad. ¿Una película con basquetbol en el centro de la historia? ¡Vamos, amigos!
Los defensores de Hollywood se apresurarán a decir, ¿y que hay acerca de Will Smith? ¿Denzel Washington? ¿Halle Berry?
Lo interesante de Hollywood es que si eres Will Smith, Denzel Washington o un puñado de otros actores, realmente no eres visto como 'negro'. Aquellos que han cruzado el umbral post-racial, y ante los ojos de Hollywood, los blancos de Estados Unidos irán a verlos.
Pero si hablas con ellos y otros tantos actores exitosos de Hollywood, también te contarán historias en las que han visto cerrarse las puertas en sus caras, y acerca de tratar de realizar películas que presentan en su mayoría a afroamericanos y les han dicho: “¿No puedes hacer a los personajes blancos?”
La última excusa ofrecida por los estudios de Hollywood es que 'las películas negras' no se venden bien en el extranjero. Lo que esto significa es que los extranjeros tampoco quieren ver a los afroamericanos. Una vez más, creo que el problema es la manera en que las películas se clasifican.
Vamos a disfrazar a dos hombres afroamericanos de mujeres. Cuando Martin Lawrence lo hace en Mi abuela es un peligro, eso no se comercializa como 'cine negro'. Como resultado, recaudó 117.5 millones de dólares en Estados Unidos y 56.4 millones de dólares en todo el mundo.
Sin embargo, Madea Goes to Jail de Tyler Perry, otra película que presenta a un hombre negro vestido como una abuela, consiguió 90 millones de dólares en Estados Unidos, y ni siquiera se molestaron en mostrarla en el extranjero. Tal vez es porque Madea's Family Vacation de Tyler Perry sólo obtuvo 50,000 dólares en ventas de boletos en todo el mundo hace tres años, y 63.2 millones de dólares en Estados Unidos.
Ahora bien, si Hollywood sabe cómo vender hombres blancos vestidos de mujer (Robin Williams en Mrs. Doubtfire y Dustin Hoffman en Tootsie), junto con repartos en su mayoría blancos, ¿no podría encontrar la manera de hacer lo mismo con Tyler Perry?
George Lucas ha expresado claramente sus temores acerca de Red Tails, con la esperanza de que tenga un gran estreno para que eso envíe un mensaje a Hollywood de que una película de acción de gran presupuesto con un montón de gente afroamericana puede tener éxito. ¿La desventaja? Si no lo consigue, será visto como un fracaso para TODAS las películas de acción afroamericanas.
Quiero que vayan a ver Red Tails, no porque sea una representación histórica de cierto período en Estados Unidos, sino porque es una película extraordinaria. Las escenas de acción son de primera categoría y la narrativa es excelente. ¿Son los personajes principales afroamericanos? Sí. Haz lo que yo hago cuando voy a ver una película que presenta un reparto lleno de blancos, lo cual sucede la mayoría del tiempo: ve para disfrutarla.
Si es así, tal vez los liberales en Hollywood finalmente se darán cuenta de que las grandes historias, cuando se venden como tales, y no como una película 'negra', pueden atraer a la gente de todo tipo a los cines .
Hubo un tiempo en que los blancos podían sentarse más cerca, y a si los negros se les permitía entrar al cine, tenían que sentarse arriba. Hoy en día, es claro que tal división racial ya no existe en los asientos, pero ahora está en la pantalla, y eso es una lástima.