Mr. Bean protagoniza una campaña para legalizar el insulto en Gran Bretaña
El actor británico Rowan Atkinson, conocido en el mundo por el personaje de Mr. Bean, se sumó a una campaña que busca derogar una ley vigente de 1986 que prohíbe el uso de "palabras insultantes" en Gran Bretaña.
"El problema de proscribir los insultos es que cualquier cosa se puede interpretar de ese modo: la crítica, la caricatura, el sarcasmo. Incluso mantener una opinión distinta a la ortodoxa se puede considerar un insulto", expresó Atkinson en el lanzamiento de una campaña.
Los activistas que participan en ese movimiento consideran que el capítulo quinto de la Ley de Orden Público de Gran Bretaña atenta contra la libertad de expresión, pues prohíbe "palabras, comportamientos y signos amenazantes, abusivos o insultantes".
Bajo esa norma, un estudiante de la Universidad de Oxford fue detenido en 2005 por haberle dicho a un agente de la policía montada: "Disculpe, ¿es usted consciente de que su caballo es gay?".
El joven fue acusado de "proferir comentarios homófobos ofensivos para los transeúntes".
En virtud de esa ley también fue acusado un manifestante que se plantó frente a la sede londinense de la Iglesia de la Cienciología con una pancarta que rezaba: "la Cienciología no es una religión, es un culto peligroso".
El diputado conservador David Davis, que se unió también a la cruzada contra la ley, consideró que "en una sociedad libre no existe el derecho a sentirse ofendido".
"Durante siglos, la libertad de expresión ha resultado vital para la vida en Gran Bretaña. Derogar esa ley significa reinstaurar ese derecho", apuntó Davis.