Woody Allen responde a las renovadas acusaciones de acoso sexual
En una columna abierta publicada este viernes por The New York Times, Woody Allen culpa a Mia Farrow por su separación debido a la falsa acusación por haber acosado sexualmente a su hija adoptiva Dylan cuando esta tenía 7 años.
La pieza de opinión del director de cine se presenta después de que se reavivaron las acusaciones de abuso de Dylan Farrow, quien lo acusó en una carta abierta publicada por el mismo diario estadounidense.
“No es que dude que Dylan no se ha creído que fuera acosada, pero si desde la edad de 7 años una madre fuerte le enseña a una niña vulnerable que debe odiar a su padre porque es un monstruo que la acosó, ¿acaso es tan inconcebible que después de muchos años de adoctrinamiento, la imagen que Mia se encargó hacer de mí, se haya enraizado?”, escribió Allen en el Times.
Dylan Farrow se mantuvo firme en sus acusaciones en una respuesta para la publicación de Allen.
“Una vez más, Woody Allen está atacándome y a mi familia en un esfuerzo para desacreditar y silenciarme, pero nada de lo que dice o escribe puede cambiar la verdad”, señaló. “Por 20 años, nunca he dudado al describir lo que me hizo. Llevaré los recuerdos de sobrevivir esas experiencias por el resto de mi vida”.
La controversia data de 1992 después de la revelación de que Allen, en ese entonces de 56 años, estaba teniendo un romance con Soon-Yi Previn, la hija de 19 años que Mia Farrow adoptó con el compositor Andre Previn. Allen y Soon-Yi Previn se casaron en 1997.
Cuando terminó la relación de 12 años entre Mia Farrow y Allen, la actriz lo acusó de acosar a Dylan, una de los dos menores que adoptó con Allen.
“20 años después, cuando escuché por primera vez que Mia Farrow me acusó de acoso sexual, la idea me pareció ridícula, que ni siquiera volví a pensar en ella. Estuvimos involucrados en un terrible y mordaz rompimiento, con una gran enemistad entre los dos y una batalla por custodia que lentamente quitó energía”, escribió Allen.
“Lo transparente que resultó su malevolencia era tan obvia que ni siquiera contraté a un abogado para defenderme. Fue mi abogado de la farándula quien me dijo que había llevado la acusación a la policía y que necesitaría un abogado criminalista”.
La acusación generó una pelea por la custodia de los hijos, y Allen acudió a la corte para obtener la custodia de los dos hijos adoptados y Satchel, su hijo biológico que ahora se llama Ronan Farrow. Pero la investigación de la policía sobre las acusaciones terminó sin ningún cargo en contra de Allen.
En ese tiempo, Allen arremetió contra las autoridades que llevaron el caso y acusó a los fiscales de generar una intriga para mantenerlo público, a fin de que influyera en la pelea por la custodia.
Incluso décadas después, el escándalo dañó permanentemente la imagen de Allen, la de un neurótico pero encantador desalineado con un talento para decir payasadas usando líneas ingeniosas.
El director de cine negó las acusaciones de Dylan y dijo que su relación con Farrow, que había sido pintada en un libro de historias a color por los medios, no era tan fuerte.
Sin embargo, el escándalo siempre ha estado en la superficie y la carta abierta en The New York Times es una de un número e instancias en meses recientes en donde la acusación ha sido mencionada.
Allen se casó con Soon-Yi Previn en 1997 y tras el acontecimiento, Allen se volvió una figura más pública. La pareja protagonizó un documental de Barbara Kopple en 1997, Wild Man Blues, que los mostró como un matrimonio feliz. Allen también fue el tema de una película de Robert Weide en 2011, Woody Allen: A Documentary, que se refirió a las acusaciones de Farrow desde el punto de vista de Allen.
En su carta abierta, Dylan Farrow criticó a varios actores por “hacerse de la vista gorda” y por continuar trabajando con Allen.
Pero en su pieza de opinión, Allen cuestionó si Dylan Farrow escribió la carta bajo su propio consenso o fue motivada por su madre para escribirla.
“¿Realmente beneficia la carta a Dylan o simplemente avanza la agenda lamentable de su madre? Eso es para dañarme con una calumnia. Incluso hay un intento patético para hacer daño profesional al tratar de involucrar a estrellas de películas, lo que huele más a Mia que a Dylan”, escribió Allen.
En un artículo de noviembre de la revista Vanity Fair, Allen fue condenado por los hijos de Mia Farrow, en especial por Dylan.
Después de la publicación del artículo, un representante de Allen le dijo a CNN: “El artículo era tan ficticio y extravagantemente absurdo que no va a hacer ningún comentario”.
El artículo, la carta de Dylan Farrow y las publicaciones de Twitter de Ronan Farrow, en las que atacó a su lejano padre, se presentan mientras el director de 78 años y su última película-Blue Jasmine-están nominadas en la temporada de premiaciones anuales de Hollywood.
Cuando la Hollywood Foreign Press Association le dio a Allen el premio por su trayectoria en los Globos de Oro en enero pasado, su hijo escribió “Me perdí del tributo a Woody Allen, ¿pusieron la parte en la que una mujer públicamente confirmó que la acosó sexualmente a los siete años antes o después de Annie Hall?”
La carta de Dylan Farrow apareció en el blog del columnista de Times Nicholas Kristof a tan solo horas antes de la ceremonia de los la Sociedad de Cinematógrafos de EU, en la que Allen estaba nominado a mejor película por Blue Jasmine. Allen no ganó.
Los votantes de la Academia empezarán a llenar sus boletas para el Oscar el 14 de febrero. Allen y su elenco están nominados a tres premios de la Academia, incluyendo mejor guión original para Allen, mejor actriz para Cate Blanchett y mejor actriz de reparto para Sally Hawkins.
Alan Duke y Todd Leopold contribuyeron a este reporte.