José Emilio Pacheco, el 'rockstar' de la literatura mexicana
Un hombre ético, modesto y amado por los jóvenes como si fuera un “rockstar”, así fue José Emilio Pacheco, escritor mexicano que recibió un homenaje este domingo en la Feria Internacional del Libro (FIL) 2014 a casi un año de su fallecimiento.
Con la presencia de su viuda, Cristina Pacheco, y su hija, Laura Emilia, el también poeta, ensayista y periodista, fue recordado por su trayectoria que incluye los libros El viento distante, Morirás lejos y, su novela cumbre, Las batallas en el desierto, entre otras.
Lee: 7 eventos que no puedes perderte en la FIL
“No hay mejor homenaje para José Emilio Pacheco que los jóvenes lo sigan leyendo”, afirmó Marisol Schulz, directora de la FIL durante el evento. “Era muy querido, como un rockstar”, agregó recordando las visitas del escritor a la feria en años anteriores y un encuentro que sostuvo con mil jóvenes.
“Ahora yo me pregunto, ¿qué escribiría José Emilio Pacheco ante todo lo que estamos viviendo en México, ante lo que estamos padeciendo como mexicanos? Nos hace falta esa voz”, dijo Schulz en referencia a los 43 estudiantes desaparecidos el 26 de septiembre pasado en Guerrero.
Sin embargo, la directora de la vigésimo octava edición de la feria agregó que más allá de su pasión por los jóvenes, era importante resaltar a Pacheco con un ser humano “tremendo”.
Lee: Las lecturas imperdibles de José Emilio Pacheco
“Les quiero decir que era un hombre muy divertido. Nos reímos mucho con él, había una parte de gozo, de felicidad y por supuesto de generosidad que hay que destacar además de toda la parte, académica, literaria y poética”, enfatizó Schulz.
Rafael Olea Franco, crítico literario, exaltó por otra parte la modestia que caracterizaba al ganador del Premio Cervantes en 2009 y recordó dos anécdotas que pasaron juntos.
“En una ocasión me pidió hacer un cambio dentro de un artículo. Yo había utilizado un término suyo para referirme al éxito de Las Batallas en el desierto, ya no Best seller, sino como Long seller, porque para ese momento el libro tenía cerca de 40 impresiones entre las dos ediciones de 1981 y l999”.
Y Olea Franco citó a Pacheco. “Te voy a pedir que lo quites porque a mis colegas escritores no les va a gustar ya que parecerá estoy presumiendo”.
Lee: Pacheco, un hombre tímido y humilde
La segunda anécdota que contó el crítico tenía que ver con una costumbre de José Emilio al mantener una conversación. “Cuando estábamos platicando siempre me decía, ‘como tú sabes’, y luego venía el dato más erudito que solo Pacheco conocía. Pero uno se quedaba con la impresión de ‘¡wow, qué sabio soy!’.”
Por último, el escritor Álvaro Uribe recordó que la ética dentro de José Emilio Pacheco era una virtud que mantuvo desde que se hicieron amigos en 1980. Una de sus mayores enseñanzas fue mostrar que quien no sabe de historia no sabe nada, afirmó Uribe.