Prisión y Línea 12: un año difícil para la jefa de Alstom
El último año ha retado a la presidenta y directora general de Alstom Mexicana, Cintia Angulo. En febrero de 2013 piso la cárcel durante dos días; luego, en marzo de 2014, inició la controversia por la Línea 12 del Metro, proyecto en el que Alstom participó. Finalmente, en junio, la empresa aprobó la venta de su división de energía a GE.
Ante la incertidumbre de su futuro en la empresa y la adversidad , Angulo asegura que son sus “principios los que me ayudan a sobrevivir como un ajolote mutante”. “Además, siempre tengo un plan B”, dice en entrevista para la revista Expansión del 15 de agosto de 2014.
La ejecutiva ocupa el lugar cinco del ranking 2014 de Las 50 Mujeres más Poderosas de Expansión.
Una "trampa"
Ella dice que sobrevivió al “pantano” de la justicia mexicana que la llevó a la cárcel en 2013, acusada por falsedad de declaraciones. Era sobre un juicio contra Alstom Mexicana por un supuesto incumplimiento en el pago de gestorías por 20 millones de dólares (mdd), que data de 1998. (Lee la entrevista completa)
Hace 16 años, ella aún trabajaba en Électricité de France, la compañía más importante del mundo en producción de energía y la tercera en distribución. Angulo dijo en su declaración ministerial ante la autoridad judicial que desconocía el tema.
Angulo asegura que es inocente y que todo fue una “trampa”. Sin embargo, los dos días que pasó en el penal femenil de Santa Martha Acatitla, en la Ciudad de México han sido la experiencia que más le “ha cimbrado y enseñado en los últimos 20 años”.
En febrero de 2014, el juzgado segundo de distrito en materia penal del Distrito Federal anuló la orden de aprehensión en su contra por la vía del amparo, según el expediente 56/2014. Sin embargo, Enrique Fernández, quien presuntamente gestionó aquellos contratos e impuso la demanda, presentó un recurso de revisión, de acuerdo con el juzgado.
En el caso, Angulo resultó inocente, según la sentencia del séptimo tribunal colegiado en materia penal.
Redes de poder
Patrick Kron, CEO global de Alstom, cuenta que en 2012 Angulo viajó a Los Cabos para asistir a la Cumbre del G-20, que integra a los países más industrializados. En la reunión, el entonces presidente de México, Felipe Calderón, atravesó casi todo el salón para saludarla.
Angulo, que tiene estudios en la Sorbona de París y en la Escuela Nacional de Administración de Francia, sabe lo que son las redes del poder. “Protegen y sustentan”, dice. “La fragilidad de una persona depende de su red: si está bien tejida, nunca caes”.
Su paso por la cárcel no fue una cuestión de contactos. “Fue una relación de fuerzas”, asegura. “Una justicia que no fue accesible en el Distrito Federal (...) por fortuna, existe el nivel federal y los jueces federales. Por fortuna”.
La polémica Línea 12
Al proceso penal se suma la controversia por las fallas de la línea 12 del metro del Distrito Federal, en la que Alstom era parte del consorcio que construyó la obra. A principios de septiembre de 2014 se espera el informe sobre el origen de las fallas.
Mientras tanto, el gobierno capitalino le asignó a la empresa un nuevo contrato por 198 millones de pesos (mdp) para el mantenimiento de los sistemas electromecánicos que tienen patente de Alstom.
El diputado local Héctor Téllez, miembro de la comisión investigadora de la línea 12, cuestionó la asignación del contrato de mantenimiento a Alstom. “Ahora -dice-, ellos mismos corrigen sus errores y eso es un claro conflicto de interés”.
Futuro incierto
Angulo ha dado resultados en la empresa. Desde su llegada, las ventas pasaron de 1,000 a 5,000 mdd. El crecimiento promedio anual en ventas es de 22%.
Está lista para concursar en la construcción de ferrocarriles de pasajeros y otros proyectos de energía ante las leyes recién aprobadas que modernizan la Comisión Federa de Electricidad.
La ejecutiva es un referente en el liderazgo femenino mexicano, pero su carrera se llenó de incertidumbre en junio. El consejo de administración de Alstom aprobó una oferta de GE por su negocio de energía. Ésta sumó 12,350 millones de euros.
La división de energía representó casi 65% de las ventas de Alstom en el mundo en el primer trimestre de 2014. Sin embargo, las ventas de este segmento cayeron 12% contra el mismo periodo de 2013. La de transporte, que significó 34% y que ahora es el negocio de la compañía tras la compra de GE, creció 16%.