En 2005, el psicólogo Cliff Arnall desarrolló una fórmula en la que consideró una serie de factores, como el clima invernal, el pago de deudas post navideñas y el regreso a la rutina laboral, además de otras variables sociales y personales –en las que incluyó el fracaso en los propósitos de Año Nuevo– para determinar qué día del año era el más triste de todos los 365. Tras sus cálculos, determinó que el día más triste era el tercer lunes de enero, y que en este 2024 se presentará el próximo día 15.
El psicólogo también señaló que ante esta combinación, las personas buscan maneras de calmar ese malestar y ello puede dar lugar a diversas compras para mitigar la depresión.
Al respecto, Zamora advierte que desde hace más de 10 años, las empresas han aprovechado esta fecha para diseñar estrategias de marketing en las que ofrecen descuentos y promociones para buscar una mejora del estado de ánimo a través de las compras.
Dada la cantidad de ofertas, Zamora, advierte que el famoso Blue Monday puede agravar el endeudamiento después de las fechas decembrinas.
“Primero hay que destacar que el impacto económico del Blue Monday no es parejo. Sectores como la tecnología, la moda y el entretenimiento suelen experimentar un aumento en las ventas, ya que los consumidores buscan distracciones y productos que les generen placer instantáneo para contrarrestar la melancolía del día”, explicó.
También señala que las personas con altos márgenes de endeudamiento deben optar por buscar soluciones financieras para no desbalancear más sus finanzas; por ejemplo, en lugar de adquirir un auto o un nuevo equipo o maquinaria, recomienda esquemas como el arrendamiento o implementar una estrategia de marketing a través del financiamiento con un crédito para evitar una descapitalización y potenciar un negocio.