“La apreciación del peso se debe a un incremento del apetito por riesgo en el mercado financiero global, lo que permite ganancias de divisas de economías emergentes”, explicó Banco Base.
El comportamiento del peso también se explica por el dato del índice de precios del consumo personal (PCE) en Estados Unidos, el preferido de la Reserva Federal (Fed) para seguir la evolución de la inflación.
El PCE subió 0.2% el mes pasado, en línea con las expectativas, después de un avance del 0.1% en junio, según mostraron los datos. En los 12 meses hasta julio, el índice de precios aumentó 2.5%, igualando el aumento de junio.
“El tipo de cambio recortó parte del retroceso de las sesiones previas, frenando la acelerada tendencia alcista de la semana y replicando, en menor medida, la corrección del viernes pasado cuando se publicaron los datos de inflación CPI en Estados Unidos”, dijo Monex en un reporte.
A pesar del repunte, el peso mexicano ha tenido un mes complicado debido al nerviosismo generado por la posible aprobación de un paquete de reformas, entre ellas la del Poder Judicial.
Bolsa
La bolsa mexicana descendía el viernes, encaminándose a culminar agosto con leves pérdidas acumuladas, mientras los inversionistas asimilaban un esperado reporte de la inflación en Estados Unidos.
El índice líder S&P/BMV IPC, que agrupa a las acciones más negociadas del mercado doméstico, bajaba un 0.29% a 52,986.67 puntos, poco después de la apertura.
En agosto, la bolsa sumaba un marginal retroceso del 0.2%.