2016 será un año catastrófico para los mercados, según RBS
"Vende todo". Tal es el angustioso consejo que da el Royal Bank of Scotland, que advirtió que se avecina un "año catastrófico" para los mercados y recomienda a sus clientes dirigirse directamente a la salida. No esperar, salirse ya.
"Vende todo excepto los bonos de alta calidad", advirtió Andrew Roberts, analista del banco, en una nota esta semana.
Dijo que el banco había detectado los focos rojos para 2016 -la caída del petróleo, la volatilidad en China, la reducción del comercio mundial, el aumento de la deuda, la deflación y préstamos a empresas con cierto riesgo- en la primera semana de cotización.
"Creemos que los inversores deberían tener miedo", señaló.
Morgan Stanley advirtió esta semana que el petróleo podría bajar a 20 dólares por barril. Mientras que RBS estima que si cae por debajo de los 30 dólares, bien podría derrumbarse a un precio de 16 dólares.
El mundo está en una recesión global, escribió Roberts. Este terrible cóctel significa que los inversionistas ahora deberían estar pensando en “recuperar su capital, no en esperar un rendimiento”.
RBS compara el estado actual del mercado con el de 2008 antes del colapso de Lehman Brothers y el inicio de la crisis financiera mundial.
Y al menos en aquel entonces, los mercados emergentes estaban allí para salvar al mundo del colapso total.
China no nos salvará esta vez, menos cualquier otro importante mercado emergente. RBS es "muy escéptico" respecto a que las autoridades chinas puedan enderezar el barco en el corto plazo. Y advierte que si no permite una gran devaluación de su moneda -en torno al 20%-, China no será de ninguna ayuda.
RBS cree que el gigante asiático sufrió una masiva salida de capitales en diciembre, que podría llegar hasta 170,000 millones de dólares, y gran parte de ese dinero se está refugiando en el dólar. Un gráfico que muestre la salida de capitales de China en 2015 es hoy "seguramente el más importante del mundo", concluyó Roberts.