Policía de Guatemala atribuye a pandilla 'Mara 18' el atentado a autobús
Las fuerzas policiales de Guatemala allanaron este martes una decena de casas en un barrio popular de la capital en busca de integrantes de la pandilla Mara 18, a la que atribuyen el atentado con bomba contra un autobús de pasajeros ocurrido este lunes.
"Se están realizando operativos en la colonia El Milagro, en donde tenemos información que tienen su guarida los integrantes de una de las clicas (grupos) de la Mara 18 que estarían detrás el atentado", informó el portavoz de la Policía Nacional Civil, Donald González.
El explosivo era una "bomba casera", de acuerdo con González, quien agregó que siguen dos líneas de investigación aunque no abundó al respecto.
La policía sospecha que la fracción de la Mara 18 que cometió el atentado es la conocida como Little Sayco Criminal.
Esa pandilla ha extorsionado a choferes y empresarios de la compañía Transportes Quetzal durante los últimos años, de acuerdo con el presidente del gremio Transportistas de Rutas Cortas Extraurbanas, Gamaliel Chin.
El autobús que sufrió el atentado cubría la ruta entre el municipio de San Juan Sacatepéquez y el centro de la ciudad. A causa del estallido murieron seis personas, entre ellas una mujer y sus dos hijos de 11 y 3 años. Otras 16 personas resultaron heridas.
Chin sostiene que habían denunciado a las autoridades que la pandilla les exigía el pago de un bono navideño por aproximadamente 7,300 dólares.
Testigos del estallido aseguran que una mujer subió al autobús, dejó una maleta y se bajó poco antes de que ocurriera el estallido. Luego abordó un auto que la esperaba y huyó.
Desde hace más de ocho años, empresarios y trabajadores del servicio de transporte público guatemalteco, así como de pequeños negocios de barrio, son víctimas de extorsiones por parte de las temidas maras , quienes asesinan a quienes se resisten a pagar los chantajes.
En el 2010 fueron asesinados 119 chóferes y 51 ayudantes del servicio de transporte público, así como 110 pequeños comerciantes, víctimas de extorsiones, de acuerdo con datos de la organización humanitaria Grupo de Apoyo Mutuo.