Bahrein acusa a los activistas de retocar imágenes para simular tortura
El presidente del Centro de Derechos Humanos de Bahrein fue presentado el domingo ante el fiscal militar de Bahrein por la publicación de fotografías de un manifestante que murió en prisión y que según los funcionarios del gobierno, está prefabricada.
Nabeel Rajab publicó en su perfil de Facebook las imágenes de un hombre identificado como Ali Isa Saqer. El hombre de la foto tiene múltiples cortes en la espalda y fuertes contusiones en el cuerpo y la cara.
Saqer, de 31 años, murió el sábado en un centro de detención, según el director general de la policía de Muharraq. Estaba detenido bajo los cargos de intento de asesinato de policías, tras intentar atropellarlos con su auto el 13 de marzo pasado.
Las autoridades explicaron que Saqer estaba provocando algunos disturbios en el centro de detención y que, cuando las fuerzas de seguridad intentaron someterlo, él se resistió y sufrió algunas lesiones en el proceso. Fue enviado al hospital y ahí falleció.
Rajab y otros activistas aseguran que las fotografías demuestran que Saqer fue torturado y asesinado mientras estaba bajo custodia policial.
“Sí, he publicado una foto, pero esta imagen no está retocada ni fue fabricada. Fue una imagen real de un hombre que tenía marcar en el cuerpo por la tortura”, dijo Rajab.
En un comunicado publicado en su sitio web, el Ministerio del Interior de Bahrein informó que la fotografía publicada por Rajab es diferente a la que se tomó en la presencia de personas médico tras la muerte de Saqer. El ministerio publicó otras dos fotos de Saqer.
En esas imágenes, el rostro del hombre aparece difuminado, por lo que fue imposible para CNN confirmar de forma independiente si el hombre de las fotografías del ministerio y las de Rajab era el mismo.
En las imágenes del gobierno se pueden ver algunos pequeños cortes y hematomas, pero nada sugiere la presencia de algún tipo de abuso, como denunció Rajab.
Un equipo de CNN viajó recientemente a Bahrein, uno de los aliados más fuertes de Estados Unidos en Medio Oriente, para trabajar en un artículo sobre activistas, blogueros y cómo se extendía la revolución en la región.
El grupo organizó una serie de entrevistas, pero la mayoría de las fuentes que habían accedido a hablar, desaparecieron. Familiares u otras personas cercanas a ellas dijeron que habían sido detenidos o habían huido después de haber recibido amenazas.
Al dar a conocer la historia, el equipo de CNN fue detenido por las fuerzas de seguridad frente a la casa de Rajab. Fueron interrogados durante seis horas y después puestos en libertad, pero se les advirtió que no podrían filmar más sin permiso.
Rajab, que fue arrestado el mes pasado, dijo que el gobierno realiza una campaña de intimidación contra él y contra otros activistas. El gobierno confirmó que Rajab fue detenido, pero no proporcionó más detalles.