Una corte de Bahrein condena a ocho opositores a cadena perpetua
Una corte de Bahrein sentenció a ocho activistas opositores chiitas a cadena perpetua tras encontrarlos culpables de conspirar para derrocar a la familia real suní, según medios locales.
Los sentenciados estaban entre 21 personas juzgadas por cargos terroristas relacionados con las protestas antigubernamentales del país, de acuerdo con la Agencia de Noticias de Bahrein.
Los acusados protestaron en voz alta apenas el juez leyó el veredicto, lo que provocó que los policías los sacaran a la fuerza de la sala.
Zainab al-Khawaja, un espectador que cuestionó la sentencia dictada contra su padre gritando "Dios es grande" fue arrestado.
Grupos de derechos humanos han exigido a Bahrein detener los juicios militares especiales porque violan las leyes del derecho internacional, de acuerdo con Human Rights Watch.
El príncipe de la corona de Bahein, Salman bin Hamad al-Khalifa, se comprometió a buscar un diálogo nacional con los manifestantes durante una reunión celebrada este mes con el presidente Barack Obama.
Las sentencias en la corte contradicen lo prometido por el presidente, según Human Rights Watch.
El activista en derechos humanos, Nabeel Rajab también desaprueba los juicios.
"Esta corte no reconoce los estándares internacionales de derechos humanos y juicios justos. Las personas fueron sentenciadas por expresar su opinión y por oponerse al gobierno", de acuerdo con Rajab. "Va en contra de los dichos del gobierno, que supuestamente quiere un diálogo".
Bahrein es una de las naciones del Medio Oriente y el norte de África inmersas en protestas antigubernamentales. La familia real gobernante pertenece a los suníes (en un país habitado en su mayoría por chiitas), y acusa a los manifestantes de actuar basados en diferencias sectarias así como de recibir apoyo de Irán.
Una docena de médicos y enfermeras acusados de tomar el control de un hospital con armas durante una protesta antigubernamental también son juzgados.
Los médicos, sus abogados y activistas de derechos humanos dicen que los acusados fueron torturados para que confesaran en contra de los manifestantes.