Policías aumentan la vigilancia en una importante favela de Brasil
La policía brasileña aumentó este miércoles su presencia en la favela más emblemática de Río de Janeiro para preparar una operación para expulsar de la zona a una banda de narcotraficantes.
Cerca de 50 agentes del Batallón de Operaciones Especiales (BOPE), cuerpo de elite de la Policía Militarizada de Río, se apostaron desde esta madrugada en los principales accesos de la barriada de tugurios e inspeccionaron los vehículos que circulaban por el barrio de la Rocinha, donde viven 70,000 habitantes, según el censo de 2010.
El comisario Carlos Augusto Nogueira Pinto explicó a periodistas que la Policía busca al cabecilla de los narcotraficantes, Antonio Bonfim Lopes, Nem da Rocinha, que está prófugo de la Justicia.
Las autoridades de Río no han confirmado cuándo pretenden ordenar la invasión de la Rocinha, pero la prensa brasileña baraja que la incursión podría ocurrir este fin de semana.
Desde finales de 2008 las fuerzas de seguridad han expulsado a los narcotraficantes de una veintena de favelas , en las que luego han inaugurado cuarteles de seguridad para patrullar estas zonas permanentemente.
Antes de cada ocupación la policía hace operaciones para confiscar drogas y arrestar a traficantes y después, el gobierno regional suele avisar que ocupará el territorio para evitar que se produzcan tiroteos que pongan en peligro a la población.
El gobierno regional anunció hace meses su deseo de ocupar la Rocinha, uno de los últimos bastiones de los narcotraficantes en las zonas turísticas de la ciudad.
Las primeras operaciones en esta favela se realizaron el pasado abril con el decomiso de drogas, y la semana pasada la policía federal de carreteras intensificó sus operaciones en las rutas de salida de Río de Janeiro, en un intento de cercar la huida de los narcotraficantes, según medios locales.
La Rocinha es la favela más emblemática de la ciudad por estar localizada en una imponente montaña entre dos de los barrios más exclusivos y adinerados de Río, Gávea y São Conrado.
Desde los años 70 se la considera como la favela más populosa de la ciudad, pero en los últimos tiempos ha sido superada con creces por los conjuntos de barriadas que se extienden en la periferia.
El conjunto de favelas del Alemão y Vila da Penha, ocupados por la policía y el Ejército hace un año, albergan a cerca de 400,000 personas, según cálculos oficiales.
