La dictadura de Pinochet gana opositores con el paso del tiempo
La mayoría de los chilenos consideran a Augusto Pinochet como una figura negativa de la política nacional, creen que el golpe de Estado de hace 40 años no estaba justificado y que su mandato significó un retraso para la democracia en Chile.
El 76% de los chilenos considera a Pinochet un "dictador", cifra un 10% superior a la de 2006, de acuerdo con la última encuesta del Centro de Estudios de la Realidad Contemporánea (CERC) de Chile . Respecto a la postura sobre Salvador Allende, entonces en el poder, un 9% de la población aún cree que fue el responsable del golpe.
El 63% de los encuestados dijo que el golpe de Estado destruyó la democracia, mientras que el 18% dijo que los libró del marxismo. Una amplia mayoría (74%) estuvo de acuerdo en que no se han olvidado las divisiones creadas por el régimen militar.
La encuesta A 4 décadas del Golpe Militar, elaborada por CERC, dejó ver la diferencia generacional cada vez más evidente entre los chilenos. Mientras la población mayor de 60 años es la que más asocia el régimen de Pinochet con una dictadura (75%), un porcentaje menor de jóvenes (67%) comparte esa idea. Una gran parte de la juventud optó por la respuesta "No sé/ No respondió".
Desde hace más de dos meses, manifestantes chilenos han salido a las calles para exigir educación pública y gratuita. En su mayoría jóvenes, piden el fin del sistema neoliberal que estableció Pinochet en 1973.
De acuerdo con la encuesta, el 54% de los mayores de 60 años dijeron que los 17 años de mandato del líder chileno fueron “solamente malos”, mientras que los jóvenes que compartieron esa postura representaron un 44%. La población de entre 41 y 60 años se inclinó hacia una opinión más negativa.
En la encuesta participaron 1,200 personas que fueron entrevistadas entre el 10 y el 22 de junio de 2013, con un error de muestreo de un 3%. CERC es una empresa privada que realiza encuestas con énfasis en el estudio del desarrollo político y los cambios económicos en Chile.
Este miércoles se conmemoran 40 años del golpe de Estado en contra de Salvador Allende, uno de los primeros líderes socialistas elegidos por un proceso democrático en América Latina. Tras el golpe, el general Augusto Pinochet quedó a cargo del país por los siguientes 17 años, en los que se registraron casi 2,300 desaparecidos y cerca de 40,000 torturados.
Entre disculpas y recriminaciones
La diferencia de opiniones de la encuesta se ha reflejado en los mensajes de los candidatos a puestos de gobierno en Chile, quienes se encuentran en la víspera de las elecciones primarias de noviembre.
El 40 aniversario ha puesto de manifiesto una división generacional y política del país, con una doble conmemoración. Una liderada por el presidente, Sebastián Piñera, y otra por la exmandataria y candidata presidencial, Michelle Bachelet.
Bachelet dijo que sentía que "las heridas vuelven a mirar de frente, que vuelven a doler, dado que traen al presente las atrocidades del pasado”. "No existe reconciliación que se construya ante la ausencia de verdad, justicia o un duelo; aún tenemos una fractura profunda entre quienes justifican la dictadura y quienes confiamos en la democracia para enfrentar una crisis", dijo.
Piñera dijo que el golpe "no fue algo súbito, sorpresivo, sino que fue el desenlace previsible, pero no por ello inevitable, de una larga y penosa agonía de los valores de la sociedad chilena". "Pudimos haber hecho más (…) No podemos permitir que las viejas generaciones traspasen a las nuevas generaciones sus divisiones, sus odios y sus enfrentamientos", agregó.
La candidata de la derecha a la presidencia, Evelyn Matthei, señaló este lunes a través de su cuenta de Twitter: "Debemos inculcar a nuestros hijos y nietos el coraje de denunciar siempre a tiempo lo que es inaceptable", aludiendo al uso de la violencia para alcanzar el poder y las violaciones de los derechos humanos.
La Asociación de magistrados del Poder Judicial de Chile pidió perdón el 5 de septiembre por las omisiones cometidas durante la época de Pinochet, cuando la justicia no protegió "a quienes fueron víctimas del abuso estatal". "Ha llegado la hora de pedir perdón a las víctimas, sus deudos y la sociedad chilena", comunicó la agrupación de jueces en su sitio de internet.
Durante el régimen militar de Pinochet, cerca de 5,000 recursos de amparo, por desapariciones o detenciones ilegales, fueron rechazados por los tribunales chilenos, que argumentaron no contar con la información suficiente para darles curso, de acuerdo con un reporte de EFE.