La élite internacional se reúne en Davos para "reestructurar el mundo"
Nota del editor: CNN está en Davos y del 20 al 25 de enero te llevará noticias de último minuto, análisis e información. Sigue a nuestro equipo en el lugar y ve la cobertura completa aquí .
(CNN) — Los líderes de los negocios, los jefes de gobierno, empresarios e incluso una que otra celebridad se codearán en la ciudad más alta de Europa, Davos, para participar en la reunión anual del Foro Económico Mundial (FEM) que se celebrará esta semana.
Klaus Schwab fundó la importante serie de conferencias en 1971 y se ha convertido en parte esencial del calendario empresarial por su intensa creación de redes, así como por las declaraciones q sobre la toma de decisiones que se emiten desde el podio.
El FEM se describe como "una organización internacional independiente comprometida con mejorar la situación mundial al lograr que los líderes políticos, académicos y sociales moldeen la agenda mundial, regional e industrial".
¿Reestructuración del mundo?
Como es tradición, el tema de la reunión anual en Davos es amplio y, a primera vista, un tanto oscuro: La reestructuración del mundo. Consecuencias para la sociedad, la política y los negocios.
El FEM señala que el tema "es una reflexión sobre las perturbaciones que las sociedades enfrentan a escala global a causa de las rápidas innovaciones tecnológicas y científicas, el cambio social acelerado y el orden económico mundial cambiante".
De acuerdo con Richard Quest, de CNN, el FEM tal vez quiera dar a entender algo con el tema que eligió. El mundo ha cambiado luego de superar cinco años de crisis, dice Quest. En consecuencia hay un "panorama en el que ya no existen las viejas reglas y las nuevas no se han escrito ni acordado".
"Los temas se presienten, todos piensan en ellos, todos sabemos que 'los tiempos son distintos' y que de ninguna manera sabemos cómo manejarlos", dice Quest. Sin embargo, plantea si los asistentes a Davos podrán unirse para trazar un plan para avanzar en este entorno. Si es una cuestión de cifras, ciertamente tienen ventaja.
Un precio de élite
La 44 reunión anual reúne a más de 2,500 líderes, pensadores y personalidades públicas que representan a más de 100 países. Solo se puede asistir con invitación.
Ciertos grupos, jefes de Estado, líderes religiosos, académicos, empresarios sociales, miembros de organizaciones internacionales y equipos de noticieros, pueden asistir de forma gratuita, pero para las empresas el costo del boleto oscila los 20,000 dólares (250,000 pesos). Gracias a esa cuota, los participantes podrán asistir a más de 250 sesiones y talleres que se basan en el tema general de la "reestructuración", del 22 al 25 de enero.
Entre los oradores invitados están el presidente de la Comisión Europea, Manuel Barroso; la directora del Fondo Monetario Internacional, Christine Lagarde; el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, y el fundador de Microsoft, Bill Gates, además de Matt Damon y Goldie Hawn.
El contexto de violencia
El foro se celebrará ante un panorama de conflicto violento en Sudán del Sur, la República Centroafricana y Siria. El líder de la oposición siria, George Sabra, asistirá a la reunión en Davos mientras en otro rincón de Suiza, Ginebra, se celebra la segunda ronda de pláticas de paz.
El baño de sangre en Medio Oriente y África del Norte ha perturbado a las economías de la región ; el más reciente reporte del Banco Mundial indicó que sigue en crisis luego de que iniciara la Primavera Árabe en Túnez hace tres años, lo que a su vez desencadenó la guerra civil en Siria.
"La inestabilidad política en Egipto, el estancamiento en Túnez y la intensificación de la guerra civil en Siria que se esparce a Líbano y Jordania han debilitado la actividad en los países importadores de petróleo", señaló el reporte.
En Irán también ha caído la producción, pero el Banco Mundial señala que las sanciones internacionales son la causa. Sin embargo, eso podría cambiar tras el acuerdo histórico al que llegaron las potencias mundiales el año pasado , un acuerdo temporal con el que se imponen limitaciones al programa nuclear de Irán a cambio del aligeramiento de las sanciones.
El presidente de Irán, Hassan Rouhani, quien sustituyó al controvertido presidente anterior, Mahmoud Ahmadineyad, el año pasado, estará en Davos y hablará sobre el tema: Irán en el mundo.
El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, también recorrerá los pasillos del FEM. Netanyahu ha descrito a Rouhani como "un lobo con piel de oveja". Se espera que de un discurso sobre El panorama económico y político de Israel. El presidente de Israel, Shimon Peres, hablará sobre la Celebración del Espíritu de Davos, con lo que tal vez se explique que los viejos enemigos vayan al mismo evento.
Los participantes tendrán algunas razones para celebrar, como que la economía ha dado señas de mejora desde la reunión del año pasado.
La nueva dirigencia de China, país que a menudo es el centro de la esperanza económica, ha aprobado políticas audaces. Se dice que la élite política del país accedió a controlar la intervención gubernamental en la economía y a hacer que las empresas estatales compitan con el sector privado en igualdad de condiciones. Las sesiones de Davos incluyen una sobre el panorama de China y otra sobre la forma en la que China, Europa y Estados Unidos pueden competir y colaborar.
Mientras tanto, las medidas audaces que el primer ministro de Japón, Shinzo Abe, ha implementado en su país para reactivar la economía han tenido impacto ya que se registró un crecimiento inicial antes de que la economía se debilitara. Dará una conferencia en el foro con el título: La reestructuración del mundo. El panorama desde Japón.
La crisis en la agenda
Europa, cuya economía en recesión ha dominado las discusiones en los eventos de los últimos dos años, parece estar en recuperación. El año pasado, la eurozona volvió a crecer por primera vez desde 2011 , pero la diferencia puede ser insignificante para los ciudadanos y las medidas de austeridad siguen en vigor. El desempleo entre los jóvenes en España y Grecia supera el 50%, mientras que los índices en Portugal, Italia e Irlanda son mayores al 30%.
En cuanto a Estados Unidos, gran parte de la atención en 2013 se centró en el techo de deuda y en el cierre de gobierno de octubre. El mal funcionamiento del gobierno fue la principal preocupación de los estadounidenses, de acuerdo con una encuesta que Gallup efectuó el año pasado.
El secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, asistirá a Davos y hablará sobre "el compromiso de Estados Unidos en la región de Medio Oriente", según el Departamento de Estado.
Una de las principales preocupaciones de los aliados tradicionales de Estados Unidos podría ser el programa de vigilancia de la Agencia de Seguridad Nacional de ese país, cuyos detalles se revelaron en los documentos que Edward Snowden filtró el año pasado .
La canciller alemana, Angela Merkel, presuntamente fue uno de los objetivos de la vigilancia y normalmente asiste a Davos, aunque este año no estará presente. Esto no se debe al accidente que tuvo mientras esquiaba (se fracturó la cadera durante una visita reciente a Suiza), dijo un portavoz, sino a que el evento coincide con una reunión del gobierno alemán.
Aunque los asistentes a Davos no se concentrarán en sus actividades deportivas invernales, muchos podrían "salirse de la pista" de la programación del evento. Las charlas al calor de las raclettes, el gluhwein y el chocolate caliente podrían ser el origen de los acuerdos.