"A mi edad no tengo mucho que perder", dice el papa sobre su seguridad

El papa Francisco aseguró a un periódico español que prefiere no usar un papamóvil con vidrios antibalas a pesar de los peligros de un intento de asesinato porque es como una “lata de sardina” con cristal, cuyas paredes lo mantienen lejos de la gente.

“Es verdad que cualquier cosa podría pasar pero enfrentémoslo a mi edad no tengo mucho que perder”, dijo al periódico La Vanguardia, de Barcelona, en una entrevista publicada este viernes y reportada en la Radio Vaticana.

“Sé que algo me podría pasar pero está en las manos de Dios”, expresó. 

Desde el intento de asesinato contra el papa Juan Pablo II en 1981, el líder de la Iglesia católica usó el papamóvil con cristal antibalas en sus visitas públicas. Pero Francisco ha tomado sus propias decisiones sobre el transporte desde que asumió el pontificado en 2013, lo que ha creado un dolor de cabeza para los encargados de su seguridad.

En un viaje a Brasil se trasladó en un Fiat color plata desde el aeropuerto a Río de Janeiro. En la ruta el vehículo quedó atrapado entre un autobús y una multitud de fieles que intentaban acercarse para tocar al papa. La seguridad se intensificó después de ese incidente.

Francisco también ha utilizado un vehículo descapotable , en lugar de la versión a prueba de balas preferido por Benedicto, para el traslado ante las multitudes de fieles en la Plaza de San Pedro.

Pese a las diferencias en el transporte, Francisco no descartó seguir los pasos de su predecesor en el cargo, Benedicto XVI, que se retiró del pontificado señalando su edad y fragilidad.

Francisco describió el retiro de Benedicto como un “gran gesto” que abrió la puerta a la creación de una institución de papa emérito, como es conocido,  dijo, de acuerdo con la Radio Vaticana.

“A medida que vivimos más tiempo, llegamos a una edad en la que no podemos seguir adelante con cosas”, dijo Francisco. “Haré lo mismo que él hizo, pedirle al señor que me ilumine cuando llegue el momento y me diga lo que tengo que hacer, me lo dirá con seguridad”, expresó.

Cuestionado finalmente sobre cómo le gustaría ser recordado por la historia, Francisco dijo que no lo había pensado. “Pero”, dijo, “me gusta cuando se recuerda a alguien y se dice 'era un buen tipo, hizo lo que pudo, y no era tan malo', con eso estaría contento”, dijo.