El resultado de la votación fue recibido de pie y con aplausos por una mayoría de la Asamblea General, que se reúne desde el lunes en una sesión especial de emergencia después de que Rusia vetara un texto similar en el Consejo de Seguridad.
En respuesta a ese bloqueo, Occidente acudió a la Asamblea General -donde no hay vetos- para denunciar las acciones de Rusia y, sobre todo, mostrar su aislamiento en la escena internacional.
Tras continuas negociaciones en los últimos días lideradas por EU, los países europeos y la propia Ucrania, la resolución fue copatrocinada por casi un centenar de países y recibió finalmente 141 votos a favor, mientras que apenas 4 países se sumaron a Rusia en el "no".
Mientras, 35 Estados optaron por la abstención (entre los que destacan China, Cuba, India y Sudáfrica) y 12 decidieron no participar en la votación (incluidos Venezuela, Marruecos y Etiopía).
Para salir adelante, la resolución necesitaba el apoyo de dos tercios de los Estados miembros que votaran.
"El Gobierno ruso está cada vez más solo", destacó inmediatamente después de la votación el embajador de la Unión Europea ante la ONU, Olof Skoog, que calificó el voto como "histórico".
"Rusia ha elegido la agresión. El mundo ha elegido la paz", recalcó Skoog, destacando la defensa del orden internacional, el diálogo y la diplomacia que hace la resolución.