Los tres terminaron fuera de la zona económica exclusiva de Japón, según la cadena pública NHK.
El lanzamiento se dio dos días después de que Corea del Norte disparara un misil balístico intercontinental (ICBM) al mar frente a la costa occidental de Japón, en lo que calificó de "simulacro de lanzamiento repentino".
La hermana del líder norcoreano, Kim Yo Jong, advirtió contra el aumento de la presencia de activos estratégicos estadounidenses en la península coreana, después de que Washington realizara el domingo ejercicios aéreos conjuntos bilaterales con Corea del Sur y Japón.
"Estamos examinando cuidadosamente la influencia que ejercería en la seguridad de nuestro Estado", dijo en el comunicado. "La frecuencia del uso del Pacífico como nuestro campo de tiro depende del carácter de la acción de las fuerzas estadounidenses".
Kim Yo Jong añadió que Corea del Norte tiene una tecnología y una capacidad de misiles "satisfactorias", y que "ahora se centrará en aumentar su fuerza".
El lanzamiento de misiles del lunes es la tercera gran prueba armamentística del Norte este año, después de que Pionyang amenazara con una respuesta "persistente y enérgica sin precedentes", mientras Corea del Sur y Estados Unidos se preparaban para sus maniobras militares anuales.