De las últimas naciones en ofrecer su ayuda, hasta ahora, es Honduras, ya que a través de la red social X, la presidenta del país Xiomara Castro, indicó que un equipo de expertos estará apoyando al país. Además de desplegar una campaña de información en radio, televisión y redes.
Además de este país, el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel envió un mensaje de solidaridad y el ofrecimiento de brigadas médicas para atender a los damnificados.
“Le quiero agradecer al presidente Miguel Díaz-Canel porque ofrecieron enviar brigadas médicas, vamos a hablar con ellos el día de hoy”, indicó el mandatario federal sobre el mandatario cubano.
Joe Biden y el gobierno de Estados Unidos también han ofrecido apoyos en la situación que vive Guerrero. A través del embajador Ken Salazar, Biden envió un mensaje en el cual le dejó saber que se contaba con el apoyo de su administración para rehabilitar el Puerto de Acapulco.
López Obrador se dijo seguro de que hay otros mensajes de solidaridad por parte de otros países, pero señaló que de ello se encarga la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) a cargo de la canciller Alicia Bárcena.
Ejemplo de estos mensajes es también el publicado por el embajador de Canadá en México, Graeme C. Clark, quien compartió fotografías sobre el estado en que quedó el Puerto de Acapulco tras el paso del huracán Otis.
Mientras que la Unión Europea también puso a disposición apoyo para la situación que vive México. A través del Centro Europeo de Coordinación y Respuesta a Emergencias (ERCC), la UE monitorea de cerca los remanentes de Otis, y busca desplegar apoyo en la entidad.
“Ante los devastadores efectos del huracán Otis en Acapulco, México, en nombre de la UE expreso nuestra solidaridad con el Gobierno y el pueblo de México ante la pérdida de vidas y los daños sufridos”, manifestó Borrell a través de su perfil en la red social X.
Otis, que ingresó el miércoles al estado de Guerrero, rompió el récord de intensificación de un ciclón en México, al pasar de tormenta tropical a huracán categoría 5 en menos 12 horas, algo “atípico” y “poco probable”, que los pronósticos internacionales “no preveían”, según la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana.
Con información de EFE.