Rusia atacó el viernes instalaciones ucranianas de generación y transmisión, provocando importantes apagones en muchas regiones, y a primera hora del domingo también fueron atacadas instalaciones energéticas en tres regiones ucranianas.
El presidente ejecutivo de Naftogaz, Oleksiy Chernyshov, declaró que los equipos resultaron dañados en el ataque y que se estaban reparando.
"La situación no afectará gravemente a las operaciones de UGS, ya que el gas se almacena en el subsuelo", escribió Chernyshov en Facebook. "La infraestructura de superficie dañada necesitará reparaciones, pero disponemos de suficiente capacidad de reserva para mitigar cualquier impacto inmediato".
Chernyshov afirmó el domingo que la empresa estaba atendiendo toda la demanda de los clientes.
El Ministerio de Energía dijo en un comunicado que "para el día de hoy se prevén importaciones de electricidad de 14,900 megavatios hora (MWh). No se prevén exportaciones". Ucrania importó 3,300 MWh un día antes del ataque del 22 de marzo, con exportaciones de 2.148 MWh.
"Ya se han evaluado las pérdidas (del ataque del viernes) y el grupo DTEK ha perdido el 50% de su capacidad de generación, podemos decir esta información oficialmente", dijo en la televisión nacional Serhiy Kovalenko, responsable de la empresa de distribución Yasno.
No dio más detalles. DTEK es la mayor empresa privada de generación eléctrica de Ucrania.