El comandante nacional de protección civil, André Fernandes, actualizó este martes a siete el balance de fallecidos.
"Lamentamos la muerte de tres bomberos", dos mujeres y un hombre, atrapados por las llamas mientras luchaban contra un incendio cerca de Nelas, en la región de Viseu, en el norte.
Un brasileño de 28 años que trabajaba en una empresa forestal en Albergaria-a-Velha, en la región de Aveiro, murió el lunes.
Otras dos personas fallecieron tras sufrir crisis cardíacas y un bombero voluntario que luchaba contra los incendios cerca de Oliveira de Azeméis murió el domingo repentinamente durante un descanso de las labores para combatir las llamas.
Los incendios de mayor envergadura golpearon la región de Aveiro y fueron especialmente destructivos en aldeas cercanas al municipio de Albergaria-a-Velha.
"Se quemaron todas mis tierras (...) tuve la suerte que mi casa no se vio afectada", relató con lágrimas Ribeiro, una mujer de 82 años que vive en el pueblo de Busturenga, que depende de la municipalidad de Albergaria-a-Velha.
"Tuvimos mucho miedo (...) nadie vino a socorrernos", afirmó.
En todo el país, hay cerca de 50 focos activos y cerca de 1,000 vehículos movilizados y una veintena de aviones y helicópteros.
Desde que las autoridades pidieran ayuda de los países del entorno, dos Canadair enviados por España se sumaron a dispositivo y durante la jornada se espera la llegada de aparatos de Francia, Italia y Grecia.