"Este es un acuerdo en el que todos ganan", dijo von der Leyen en una rueda de prensa junto a los presidentes de Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay.
"Este acuerdo no es sólo una oportunidad económica, es una necesidad política", añadió. "Sé que vienen fuertes vientos en dirección contraria, hacia el aislamiento y la fragmentación, pero este acuerdo es nuestra respuesta".
Francia, el país de la UE que más ha criticado el acuerdo, lo ha tachado de "inaceptable". La ministra francesa de Comercio, Sophie Primas, se comprometió a oponerse a las siguientes fases del pacto, alegando preocupaciones medioambientales y agrícolas.
"Un acuerdo de este tipo no es una solución, no hay soluciones mágicas (...) es una oportunidad y estará en cada uno de nosotros la velocidad que le demos a este acuerdo, cada uno en nuestros países", dijo por su parte el presidente uruguayo Luis Lacalle Pou.
El canciller alemán, Olaf Scholz, declaró que se había superado un importante obstáculo para la conclusión del tratado comercial, que "creará un mercado libre, más crecimiento y competitividad para más de 700 millones de personas".
Las asociaciones alemanas de comercio e industria celebraron el anuncio del viernes.
"Acuerdos tan importantes no deben tardar 25 años", afirmó en un comunicado el presidente del lobby comercial BGA, Dirk Jandura, quien añadió que ahora depende del Gobierno alemán garantizar que haya una mayoría a favor del "hito" que supone el acuerdo en la Unión Europea.
En contrapartida, el grupo de presión de los agricultores europeos Copa-Coge reiteró su oposición al tratado comercial y convocó una acción de protesta en Bruselas para el lunes. Los agricultores afirman que los productos del Mercosur no cumplen las normas de la UE y crearían una competencia desleal.
El Mercosur dijo en una declaración conjunta que el acuerdo estaba listo para su revisión jurídica y traducción, y que ambos bloques estaban decididos a llevar a cabo estas actividades en los próximos meses.
El acuerdo comercial requeriría la aprobación de 15 de los 27 miembros de la UE, que representan el 65% de la población del bloque, junto con una mayoría simple en el Parlamento Europeo.
Los negociadores sudamericanos siguen confiando en que la UE acabe dando su aprobación y en que Francia no consiga reunir una minoría de bloqueo.
(Reportes de Lucinda Elliott y Lisandra Paraguassu en Montevideo y Philip Blenkinsop e