La detención de Mangione ocurrió tras una intensa persecución de cinco días que involucró a varios cuerpos de seguridad y culminó en su arresto el 9 de diciembre. Según la fiscalía, Mangione enfrenta cargos de asesinato en primer y segundo grado, además de posesión criminal de un arma.
El fiscal de distrito de Manhattan, Alvin Bragg, condenó enérgicamente el ataque. “Este tipo de violencia premeditada y selectiva con armas de fuego no puede tolerarse ni se tolerará”, señaló en un comunicado al anunciar la imputación.
Mangione, de 26 años, es descrito por amigos como una persona que lidiaba con intensos dolores crónicos de espalda, una condición que según publicaciones en sus redes sociales, impactaba de manera significativa su vida diaria. A pesar de esto, las autoridades no han determinado si su estado de salud jugó un papel en el ataque ni el motivo exacto detrás del crimen.
Los investigadores indicaron que el ataque parecía ser premeditado y dirigido específicamente contra Thompson, quien era CEO de UnitedHealth Group, una de las mayores empresas de servicios de salud en Estados Unidos. Las autoridades aún analizan las posibles conexiones entre el acusado y la víctima.
Mangione permanece detenido sin derecho a fianza mientras su defensa prepara su estrategia legal para enfrentar los cargos, que podrían llevarlo a cadena perpetua si es declarado culpable.