Publicidad
Publicidad

El mayor ataque con drones de Ucrania contra Moscú provoca dos muertes

Rusia asegura que derribó 337 vehículos no tripulados, 91 de ellos en la región capitalina.
mar 11 marzo 2025 12:39 PM
Un escaparate dañado en el reciente ataque con drones de Ucrania, según las autoridades locales, en el curso del conflicto Rusia-Ucrania, en Domodedovo, en la región de Moscú, se ve en esta imagen publicada el 11 de marzo de 2025.
La capital rusa se ubica a cientos de kilómetros de la frontera ucraniana y pocas veces ha sido blanco de ataques en este conflicto.

Un "ataque masivo" de drones ucranianos contra Moscú cobró la vida de al menos dos personas y dejó otras 18 heridas, de acuerdo con autoridades rusas. También provocó un breve cierre de los cuatro aeropuertos de la capital que obligó a desviar decenas de vuelos.

Un total de 337 drones ucranianos se derribaron sobre Rusia, 91 de ellos sobre la región de Moscú y 126 sobre la región de Kursk, donde las fuerzas ucranianas se han estado replegando, según el Ministerio de Defensa. Se trata del mayor ataque contra territorio ruso desde el inicio de la ofensiva del Kremlin contra Ucrania, en febrero de 2022.

Publicidad

El ataque masivo con drones al amanecer se produjo justo cuando un equipo de representantes ucranianos se dispone a reunirse con uno estadounidense en Arabia Saudita para tratar de sentar las bases de unas posibles conversaciones de paz en esta guerra que ya ha cumplido tres años, y mientras las fuerzas rusas tratan de cercar a miles de soldados ucranianos en la región de Kursk, en el oeste de Rusia.

En la cita de Yedá, la parte ucraniana presentará un plan para una tregua parcial con Rusia con la esperanza de reconciliarse con el presidente estadounidense, Donald Trump, que exige a Kiev concesiones para terminar con más de tres años de conflicto.

Kiev ha sufrido ataques masivos constantes por parte de Rusia durante la guerra y el martes dijo que Ucrania fue alcanzada por un misil balístico y 126 drones. Ha tratado de contraatacar a su vecina mayor, de vasta extensión, mediante ataques con drones contra refinerías de petróleo, campos de aviación e incluso estaciones de radar de alerta temprana.

Medios rusos difundieron en redes sociales imágenes de edificios residenciales impactados por la caída de escombros de los drones, con ventanas rotas y agujeros en los tejados.

El alcalde de Moscú, Serguéi Sobianin, dijo que el ataque del martes era el mayor ataque con drones de Ucrania contra la ciudad, que junto con la región circundante tiene una población de al menos 21 millones de habitantes y es una de las mayores áreas metropolitanas de Europa.

Publicidad

Un alto parlamentario ruso indicó que Rusia debería tomar represalias por el ataque del martes lanzando el misil hipersónico Oreshnik, que Moscú disparó a Ucrania en noviembre después de que Estados Unidos y Reino Unido permitieran a Kiev efectuar ataques al interior de Rusia con misiles aportados por Occidente.

El coronel general Andréi Kartapolov, presidente del comité de defensa del Parlamento y exviceministro de Defensa, dijo que tal decisión la debía tomar el presidente Vladimir Putin. "No obstante, creo que sería útil. Y no solo uno", añadió.

Miratorg, uno de los mayores productores de carne de Rusia, dijo que dos empleados fallecieron debido a la caída de escombros. Otras 18 personas resultaron heridas, entre ellas tres niños, pues algunas viviendas también han sido alcanzadas, dijeron autoridades rusas.

La capital rusa se ubica a cientos de kilómetros de la frontera ucraniana y pocas veces ha sido blanco de ataques en este conflicto.

El organismo ruso de control de la aviación dijo que se habían suspendido los vuelos en los cuatro aeropuertos de Moscú para garantizar la seguridad aérea tras los ataques, aunque luego se han reanudado. Los vuelos se desviaron a otras ciudades.

La guerra se recrudece

Aunque el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dice que quiere instaurar la paz en Ucrania, la guerra se está recrudeciendo en el campo de batalla con una gran ofensiva rusa de primavera en Kursk y una serie de ataques ucranianos con drones en el interior de Rusia.

Publicidad

En un discurso pronunciado en la Escuela Superior de Economía de Moscú, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, advirtió del riesgo de que la gente se entusiasme con la posibilidad de que Elon Musk corte el acceso de los militares ucranianos a su sistema de comunicaciones Starlink o con la decisión de Trump la semana pasada de suspender la ayuda militar a Kiev.

"No se apresuren a ponerse las gafas de color de rosa", dijo Peskov a la audiencia. "Siempre tenemos que esperar lo mejor, pero estar preparados para lo peor. Y siempre debemos estar preparados para defender nuestros intereses".

Rusia ha desarrollado un sinnúmero de "paraguas" electrónicos sobre Moscú y sobre instalaciones esenciales, con capas internas avanzadas adicionales sobre edificios estratégicos, y una compleja red de defensas aéreas para derribar los drones antes de que lleguen al Kremlin, en el corazón de la capital.

El conflicto bélico, el mayor en Europa desde la Segunda Guerra Mundial, ha combinado un choque de desgaste de trincheras y artillería al estilo de la Primera Guerra Mundial con la gran innovación de los drones.

Moscú y Kiev han tratado de comprar y desarrollar nuevos aviones no tripulados, desplegarlos de forma innovadora y buscar nuevas formas de destruirlos, desde el uso de escopetas de agricultores hasta avanzados sistemas de interferencia electrónica.

Ambas partes han convertido drones comerciales baratos en armas mortíferas, al tiempo que aumentaban su propia producción.

Los soldados de ambos bandos han expresado tener un miedo visceral a los aviones no tripulados, y ambos bandos han utilizado en su propaganda vídeos macabros de ataques mortales con drones, en los que se ve a soldados volando por los aires en retretes o huyendo de vehículos en llamas.

El presidente de Rusia, Vladimir Putin, que ha tratado de aislar a Moscú de los rigores de la guerra, ha calificado de "terrorismo" los ataques ucranianos con drones contra infraestructuras civiles, como centrales nucleares, y ha prometido una respuesta.

Moscú, la ciudad más rica de Rusia con diferencia, ha experimentado un auge durante la guerra, impulsado por el mayor gasto en defensa desde la Guerra Fría.

Newsletter

Únete a nuestra comunidad. Te mandaremos una selección de nuestras historias.

Publicidad

Publicidad