"La incidencia de la pobreza monetaria (medida por ingreso) observada en 2024 en la región constituye el valor más bajo desde que hay datos comparables", dijo la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) en su "Panorama Social" de 2025.
México y Brasil impulsan la mejoría
La reducción de la pobreza se explica, principalmente, por los resultados de México y, en menor medida, de Brasil.
"Esto es así, fundamentalmente, por el peso demográfico de estos países, que representan el 52% de la población total", pese a que no fue donde cayó más la pobreza, afirmó en conferencia de prensa José Manuel Salazar-Xirinachs, secretario ejecutivo de la CEPAL.
En ambos casos, al tratarse de una medición por ingresos, influyó el aumento del monto de los salarios reales.
En México también influyó, entre otros factores, la política de becas universitarias, las transferencias estatales a poblaciones vulnerables y la universalización de las pensiones, dijo el secretario ejecutivo del ente técnico dependiente de Naciones Unidas.
La caída de los niveles pobreza en Latinoamérica se da en un contexto de normalización post pandemia, con una recuperación del mercado laboral y una paulatina disminución de los niveles de inflación.
El aumento de precios, asociado a otros impactos como la guerra en Ucrania, que afectó en especial a los alimentos y la energía, también empezó a ceder.
Para 2025, la CEPAL proyecta una leve reducción de la pobreza, debido a las "limitadas perspectivas de crecimiento regional”.