Oaxaca acepta investigar las desapariciones de presuntos miembros del EPR
Los casos de los eperristas Edmundo Reyes Amaya y Gabriel Cruz Sánchez, desaparecidos desde hace más de tres años, serán investigados por el actual gobierno de Oaxaca, aseguró el mandatario de la entidad Gabino Cué este lunes.
Los presuntos integrantes del Ejército Popular Revolucionario (EPR) presuntamente fueron detenidos por militares y por policías federales el 25 de mayo de 2007.
Desde entonces los familiares y el grupo rebelde han denunciado que Reyes Amaya y Cruz Sánchez fueron llevados a un penal , donde podrían encontrarse incomunicados o privados de su libertad legal o ilegalmente. Desde entonces quedaron en paradero desconocido.
El gobierno federal y estatal rechazaron las versiones.
A casi cuatro de las presuntas desapariciones forzadas, el gobernador Gabino Cué informó que retomarán el caso y que de esta forma acepta la recomendación que hizo la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) de febrero de 2009.
En su recomendación, el entonces ombudsman José Luis Soberanes solicitó que se realizaran las gestiones necesarias para la presentación inmediata con vida de los que hasta ahora permanecen desaparecidos.
También consideró que si Reyes Amaya y Cruz Sánchez incurrieron en la comisión de alguna antijurídica, sean puestos a disposición de las autoridades respectivas, pero con la posibilidad de que hagan efectivos sus derechos constitucionales, situación donde se exige conocer "la suerte final que corrieron ambas personas".
En febrero pasado el gobierno federal afirmó que esta recomendación ya fue cumplida .
El presidente de la CNDH, Raúl Plascencia, dijo que a partir de que el gobierno de Oaxaca acepta la recomendación, dependerá de éste informar de los avances de esta investigación.
Una conflictiva Oaxaca
Cuarenta días después de la desaparición presuntamente forzada de Edmundo Reyes Amaya y Gabriel Cruz Sánchez, el Ejército Popular Revolucionario (EPR) hizo estallar oleoductos de la paraestatal Petróleos Mexicanos (Pemex) en el centro y el golfo, como una “campaña nacional de hostigamiento” hasta que los gobiernos federal y de Oaxaca presentaran con vida a sus dos integrantes.
El EPR es un grupo insurgente que forma parte del Partido Democrático Popular Revolucionario (PDPR). Desde 1994 se interesan en instaurar el comunismo en México, especialmente en las comunidades campesinas y los pueblos indígenas.
Su principal área de operación es en los estados de Guerrero , Oaxaca y Chiapas.
En junio de 2008 se formó una Comisión de Mediación —integrada por intelectuales y activistas— entre el gobierno federal y el EPR con la finalidad de que Reyes Amaya y Cruz Sánchez sean presentados con vida, sin que hasta el momento se logre ese objetivo.
El pasado 31 de marzo, el Grupo de Trabajo de Naciones Unidas sobre Desapariciones Forzadas o Involuntarias presentó un informe preliminar sobre el número de casos reportados por las organizaciones civiles. Éstas afirman que han registrado 3,000 casos desde 2006, cuando inició el mandato de Felipe Calderón.