El PAN y el PRD exigen llamar a un período extraordinario en el Congreso
Los partidos Acción Nacional (PAN) y de la Revolución Democrática (PRD) impulsan la realización de un período extraordinario de sesiones en el Congreso, a fin de que sean aprobadas las iniciativas pendientes en materias como política, seguridad y empleo.
El área de comunicación del Senado informó que la propuesta de llamar a un período extraordinario fue presentada en la Cámara Alta por el perredista Pablo Gómez, mientras en la Cámara de Diputados lo hizo el panista Carlos Alberto Pérez Cuevas.
Las propuestas fueron enviadas a las juntas de Coordinación Política de ambas cámaras, que deben analizarlas en los próximos días.
Si la junta del Senado se manifiesta a favor, tendría que definir específicamente qué iniciativas deberán ser tratadas durante ese período extraordinario, así como emitir un exhorto a la Cámara Baja para que lo convoque, de acuerdo con personal de comunicación de los senadores del PRD.
El exhorto —que podría ser lanzado la siguiente semana— sería recibido por la Cámara de Diputados porque ahí se encuentran los principales temas que quedaron pendientes al término del período ordinario, el 30 de abril.
Los asuntos rezagados en la Cámara Baja son la Ley de Seguridad Nacional y las reformas política y laboral .
El Senado ya aprobó la Ley de Seguridad Nacional, una norma que —según el gobierno— busca fortalecer la capacidad del Estado para combatir a la delincuencia, aunque ha sido criticada por activistas, pues consideran que daría al presidente facultades para suspender las garantías con el pretexto de la lucha anticrimen .
También avaló ya la reforma política, que incluye la reelección de legisladores, las candidaturas ciudadanas y la consulta popular. Sin embargo, para que estas figuras puedan aplicarse en las elecciones federales de 2012, deben entrar en vigor antes de junio próximo, lo que implica que pasen por la Cámara de Diputados y al menos 17 congresos estatales .
La reforma laboral, afirman el gobierno y sus partidarios, tiene la finalidad de impulsar la generación de empleos, pero sus críticos argumentan que afecta a los trabajadores con el establecimiento de medidas que, entre otras cosas, facilitan el despido.