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La marcha nacional llega a su destino en el Zócalo de la Ciudad de México

El padre Alejandro Solalinde, defensor de los derechos de los migrantes, se unió al movimiento para exigir el cese de la violencia en México
dom 08 mayo 2011 04:37 PM

Luego de más de siete horas de haber salido de Ciudad Universitaria, en el sur de la ciudad de México, los convocantes a la Marcha por la Paz llegaron al Zócalo capitalino.

Miles de manifestantes vestidas de blanco y con globos del mismo color rompieron con sus aplausos el silencio de la marcha al momento en que el escritor Javier Sicilia y el contingente que lo acompaña entraron a la Plaza de la Constitución, a las 16:00 horas.

Según reportes de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal (SSPDF), en la marcha que salió el jueves de Cuernavaca, Morelos, participan más de 65 mil manifestantes.

Un contingente de migrantes centro y sudamericanos, encabezados por el padre Alejandro Solalinde , y representantes del Movimiento Social de San Salvador Atenco, encabezados por Ignacio del Valle, se incorporaron junto con miles de ciudadanos a la Marcha por la Paz y la Justicia que se dirige hacia el Zócalo capitalino junto con el poeta Javier Sicilia .

Ciudadanos que desean unirse a la manifestación esperan en las aceras el paso del contingente para incorporarse al grupo. Todos marchan por las calles de la ciudad de México para exigir un alto a la violencia en el país.

Algunos otros han salido con paquetes de agua embotellada y comida que reparten a los manifestantes. También hay personas que regalan ramos de flores.

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Cuando el padre Solalinde, quien vive en Oaxaca y es conocido por su defensa de los derechos de los migrantes , se unió a la marcha, el poeta Javier Sicilia le agradeció el apoyo y pidió un minuto de silencio por un zapatista que venía en camino hacia la ciudad de México con la intención de incorporarse al movimiento y que falleció en un accidente carretero.

El Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) salió por primera vez en 10 años a las calles para unirse al movimiento , con una marcha que convocó a cerca de 20,000 zapatistas el sábado en San Cristóbal de las Casas, Chiapas. En Veracruz, Zacatecas y Ciudad Juárez también se han realizado marchas de apoyo.

Isabel Miranda de Wallance es otra de las activistas que este domingo se unió al movimiento. Miranda cobró relevancia por perseguir y encontrar por su cuenta a los secuestradores de su hijo, Hugo Alberto. Más tarde fundó la asociación Alto al Secuestro y promovió la Ley General para Prevenir y Sancionar los Delitos en Materia de Secuestro. Es Premio Nacional de Derechos Humanos 2010 .

Eduardo Gallo, otro activista en contra de la inseguridad que recientemente dejó la dirigencia de la organización, México Unido contra la Delincuencia tras acusar un mal manejo de fondos, también acompaña el contingente que encabeza la marcha.

Cansados de tantas muertes

Ignacio del Valle, representante del Movimiento Social de San Salvador Atenco, dijo este domingo que se unían a la marcha no solo para que la autoridades escucharan el llamado contra la violencia, sino también para que el pueblo se dé cuenta de que hay muchas personas que están cansadas de tantas muertes.

El movimiento de Atenco inició por la oposición de los habitantes del lugar a la construcción de un aeropuerto de la Ciudad de México.

Uno de los momentos más emotivos de la jornada fue cuando el contingente pasó frente al templo católico la iglesia de San José Altillo, donde están religiosos cercanos el Javier Sicilia. Ahí, jóvenes y padres de familia, lo recibieron con discursos de apoyo que cerraron con consignas como "Ni uno más" y "No estás solo" que se pronunciaron en coro. Luego soltaron globos blancos para simbolizar la paz que necesita el país.

La marcha se desarrolla en silencio, aunque por momentos, estudiantes gritan consignas como "No más sangre", y lanzan porras, entre éstas la goya de la UNAM.

El grupo es formado por activistas y ciudadanos. En los edificios hay personas que se asoman por las ventanas y sacan pañuelos o telas blancas para saludar. En los puentes peatonales también hay grupos que aguardan para dar su apoyo al contingente.

El apoyo de los transeúntes y peatones que no participan en la marcha ha sido evidente. Desde los autos, los conductores suenan el cláxon para manifestar su simpatía y algunos peatones se han acercado a saludar a los manifestantes.

A la mitad de la marcha, un anciano que caminaba con dificultad, se acercó a Sicilia mientras una mujer le ayudaba a empujar el tanque de oxígeno que utiliza para respirar. Ahí le manifestó su apoyo y le pidió mantener el movimiento sin mezclarlo con intereses políticos.

La marcha fue convocada por Sicilia , luego de que su hijo fue encontrado muerto adentro de un automóvil en Morelos junto con otras seis personas a finales de marzo pasado.

El poeta y periodista es acompañado por víctimas de otros delitos e injusticias en el país como familiares de personas que murieron en masacres, padres de niños que fallecieron quemados en una guardería de Hermosillo, Sonora, al norte del país, y parientes de personas que fueron asesinadas por criminales, policías o militares.

La marcha partió de Cuernavaca, Morelos, el jueves 6 de mayo, y tiene como meta llegar antes de las 16:00 horas de este domingo al Zócalo capitalino. El recorrido abarca aproximadamente 80 kilómetros de distancia. Esta mañana partió desde Ciudad Universitaria , de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), al Centro Histórico de la capital mexicana.

La marcha inició con aproximadamente 500 personas, pero a medida que ha avanzado ha aumentado en tamaño, ahora son miles.

Los participantes exigen el fin de la violencia provocada por el combate del gobierno federal al crimen organizado, que según cifras oficiales ha dejado 34,612 muertes desde diciembre del 2006 hasta diciembre del 2009.

Panfleto estudiantil

Durante la marcha, un grupo autodenominado Los brigadistas-Estudiantes universitarios, reparte un panfleto titulado: "¡Ya estuvo! Tenemos que ponerle un alto al narco y al gobierno", en el que identifican tres elementos que cobran especial importancia al analizar qué condujo al país a su actual situación.

Primero, el negocio del narcotráfico y sus beneficiarios; el neoliberalismo preparó el terreno y, finalmente, la militarización que "ha venido a evidenciar que los militares y marinos son tan crueles y tan criminales como los otros".

El grupo de estudiantes reclama mayores oportunidades de estudio y trabajo para todos.

Con información de Débora Montesinos y Notimex

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