Cherán consigue autonomía política; se regirá por usos y costumbres
Con la fogata prendida, alrededor de 50 hombres mantienen la guardia detrás de una barricada a la entrada de Cherán, municipio en la zona boscosa en el sur de Michoacán. Aunque escuchan música y platican mientras beben café de olla, se mantienen atentos al ladrido de los perros.
De pronto, los faros de un automóvil aparecen a lo lejos sobre la carretera que viene de Morelia, capital del estado en el suroeste de México. Detrás de los sacos de arena de la barricada, un encapuchado hace parpadear una lámpara a la distancia. El vehículo frena y regresa por donde venía.
Desde el viernes pasado, la comunidad indígena —la mayoría de la etnia purépecha— cerró sus cuatro accesos para garantizar la seguridad en un domingo definitorio: mientras que el resto del estado celebra la jornada electoral para elegir gobernador, diputados y alcaldes, aquí transitan en una tensa calma hacia un sistema de usos y costumbres, el primero en Michoacán .
Han mantenido el cerco que los aísla del exterior durante siete meses, cuando se enfrentaron a supuestos talamontes relacionados con el crimen organizado. Cherán ha vivido en estado de sitio desde el 15 de abril pasado cuando demandaron la presencia del ejército y fuerzas federales, pues consideran que no sólo los bosques, sino también sus vidas, están amenazados. Además de la tala ilícita, también habían observado extorsiones y secuestros.
Recientemente, por asamblea decidieron que nadie podría entrar ni salir hasta este lunes a las 5:00 horas. El sábado pasado en particular, la consigna era evitar la entrada de personal del Instituto Electoral de Michoacán (IEM).
El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) aprobó el pasado 2 noviembre que Cherán eligiera a sus representantes municipales sin la intervención de los partidos políticos. Sin embargo, quedó la incertidumbre de si se permitiría la instalación de casillas para Congreso local y gubernatura .
“Se dio hasta la medianoche del sábado para que el gobierno estatal presentara a las cabecillas del narcotráfico que operan en la región o no lo permitiríamos”, explica Santiago Tapia, miembro de la Coordinación General de la comunidad.
La exigencia no fue cumplida y ante la posible entrada del IEM, las casi 200 fogatas de los cuatro barrios se mantuvieron activas hasta el amanecer del domingo. El doctor Juan Navarrete Moreno asegura que están habituados al desvelo desde que decidieron cercar el pueblo hace siete meses para protegerse contra la extorsión de los talamontes y el crimen organizado.
Las familias se turnan para mantener el fuego encendido, mientras la ronda comunitaria, recorre un pueblo sin propaganda partidista pero con mantas y pintas: “Nuestros sueños no caben en sus urnas”, “Yo sé que ni el frío ni el calor ni el viento acabarán con el movimiento, en lucha hasta la victoria”, “Cherán, ejemplo de lucha en defensa de sus bosques”.
Aunque hay una minoría dentro de Cherán en contra del cerco, porque dificulta el comercio o impide los apoyos del gobierno, las mejoras en seguridad son palpables según los comuneros.
Margarita Ambrosio, la única mujer dentro de la Coordinación, recuerda que antes del 15 de abril era riesgoso salir de noche. A su esposo lo asesinaron el 4 de octubre de 2009 —denuncia ella— por defender los bosques.
Hoy las familias hacen las tres comidas en la calle alrededor del fuego con los víveres que han donado las organizaciones de la sociedad civil y los migrantes de Cherán en Estados Unidos. Se puede percibir el olor a madera de ocote y ver el humo en cada esquina, donde cada grupo tiene una responsabilidad distinta dentro del nuevo gobierno.
Los partidos políticos, fuera de Cherán
Como un acto simbólico, este domingo alrededor de 10,000 personas marcharon desde las barricadas hacia el centro. El triunfo para los comuneros es que hoy se vuelve una realidad la resolución del TEPJF y se extinguen en Cherán los partidos políticos.
El siguiente paso, que también se manifiesta en las mantas, será que el gobierno reconozca a través de la consulta su nuevo sistema de fogatas, asambleas de barrio y un gobierno comunitario. 200 miembros del Consejo Operativo y 12 del Consejo de los Mayores, personas respetadas en el pueblo, guiarán este proceso que apenas comienza.
“Mientras el gobierno no nos garantice nuestro derecho a la seguridad —dice el doctor Navarrete— (continuará) el sitio”. Las cuatro barricadas permanecen en los accesos a Cherán y la comunidad decide en asamblea cuáles serán los siguientes pasos en la organización comunitaria.
Hace siete meses, la comunidad purépecha de Cherán expulsó al crimen organizado, hoy expulsan a los partidos políticos.