Las trabajadoras del hogar: discriminación institucionalizada en México
Trabajar como responsable de la limpieza y mantenimiento de hogar es una de las peores opciones de vida en México: ganan poco y prácticamente no tienen ningún derecho laboral, según la Encuesta Nacional sobre Discriminación en México (Enadis) 2010 dada a conocer este martes.
Casi dos millones de personas desempeñan esta labor en México, una cifra superior a los empleados como oficinistas en instituciones de gobierno. Nueve de cada 10 son mujeres, y regularmente no tienen contrato laboral ni acceso al seguro médico.
"La discriminación no solo está legalizada sino institucionalizada e inculturada" en México, dice el presidente de la Conapred, Ricardo Antonio Bucio Mujica, en entrevista con CNNMéxico.
Por ejemplo, la Ley Federal del Trabajo establece que las trabajadoras del hogar tienen derecho a salario, descanso, alimentación y a hacer sus labores en un lugar higiénico, pero las excluye del derecho a la vivienda, la reinstalación laboral, la seguridad social o la negociación colectiva.
La Ley General de Salud por su parte, anota que sólo pueden ser inscritas en el régimen voluntario, es decir, deben cubrir sus propias cuotas obrero patronales y no tienen derecho a guardería ni prestaciones sociales como la pensión.
El 90% no tiene contrato laboral, sino que hace un "acuerdo de palabra" con su empleador, lo que las pone es desventaja.
“Como las condiciones de trabajo no quedan determinadas por escrito, están sujetas a una concepción particular, subjetiva y privada de cuáles son sus funciones y de cuál es la naturaleza del trabajo”, establece la Enadis.
Las principales actividades realizadas por las trabajadoras domésticas -que en su mayoría son indígenas o mujeres empobrecidas- son limpiar, lavar, planchar, cocinar y en menor medida, hacen reparaciones, cuidan a niños, a enfermos y ancianos, según la Enadis.
Por estas labores, el 43.7% recibe entre 500 y 1,000 pesos semanales, casi la mitad (47.5%) trabaja todo el día y 6.5% no tiene días de descanso.
Aunque los empleadores "se concentran en los estratos con los ingresos más altos de la población", no pagan salarios más altos porque la contratación resultaría muy costosa, según documentó la encuesta.
Con este trabajo, la Conapred busca impulsar que una reforma a la Ley Federal del Trabajo y la Ley General de Salud para ofrecer seguro médico a las trabajadoras domésticas.
La Conapred, en colaboración con la Organización de las Naciones Unidas Mujeres y la Organización Internacional del Trabajo (OIT) presentará los resultados de la Enadis ante el Senado de la República, órgano encargado de crear y reformar las leyes del país.
"Esperamos que haya apertura de parte de los senadores y senadores", dijo Bucio Mujica, quien recordó que en las cinco legislaturas pasadas no se ha presentado ninguna iniciativa para mejorar las condiciones labores de las trabajadoras domésticas.
El Conapred también espera que el Senado ratifique el convenio 189 de la OIT aprobado en junio en Ginebra, y firmado por México, en el que establecen las condiciones mínimo laborales y de seguridad social para las trabajadoras domésticas.
La encuesta la elaboró el Área de Investigación Aplicada del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Universidad Nacional Autónoma de México, del 14 al 23 de noviembre del 2010 en 13,571 hogares donde se obtuvo información de 52,095 personas en 32 estados. El margen de error es de más menos 1.