EU prohíbe negocios con dos empresarios mexicanos acusados de narcotráfico
El gobierno de Estados Unidos señaló a los empresarios mexicanos Benjamín Figueroa Vásquez y su hijo Hassein Eduardo Figueroa Gómez, así como a 16 de sus compañías en México y Panamá, por tráfico de drogas.
La Oficina de Control de Bienes Extranjeros (OFAC, por sus siglas en inglés) del Departamento del Tesoro estadounidense los identificó como responsables de desviar e importar pseudoefedrina y efedrina desde Europa y África, según un comunicado de la Embajada de Estados Unidos en México, por lo que prohibió a sus ciudadanos llevar a cabo transacciones con ellos o sus empresas.
La investigación indica que ambos distribuían precursores a "grandes organizaciones mexicanas de tráfico de drogas que fabrican metanfetaminas en México para su distribución en Estados Unidos", de acuerdo con el comunicado.
En noviembre de 2011, ambos fueron acusados por un gran jurado de del estado de Virginia por "conspiración para lavar dinero en conexión con un supuesto tráfico de precursores químicos ".
Figueroa Vásquez permanece en prisión en México después de ser detenido en septiembre de 2011.
El fichaje fue realizado en cooperación entre la OFAC, la DEA y los gobiernos de México y Bélgica. Las dieciséis empresas de los Figueroa operaban en México y Panamá bajo distintos giros, desde compañías de la construcción, bienes raíces hasta farmacéuticas, según las indagatorias.
"Esta organización se ha desempeñado por años como un facilitador mayor para algunas de las más violentas y brutales redes mexicanas de drogas en el mundo", dijo el jefe de Operaciones Financieras de la agencia antidrogas DEA, John Arvanitis.
A través de la Ley Kingpin, el gobierno estadounidense prohíbe a sus ciudadanos realizar negocios con los inculpados y sus empresas, además de congelar los bienes que se encuentren en territorio de Estados Unidos, señaló la Embajada estadounidense.
Desde junio del 2000, el Departamento del Tesoro ha fichado a "más de 1,000 empresas con vínculos a cabecillas del narcotráfico". Las faltas a la Ley Kingpin pueden ser castigadas con multas de hasta 1,075 millones de dólares por cada violación, y penas criminales de hasta 30 años de prisión a personas vinculadas.