Excandidato del PRI es investigado por asesinato de un brigadista del PAN
La Procuraduría General de Justicia del Estado de Chiapas (PGJE) informó este martes que inició un proceso penal en contra del excandidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI) a la alcaldía de Villaflores, Ulises Grajales Niño, por su probable responsabilidad en el delito de “homicidio calificado en grado de cómplice secundario".
Grajales Niño es relacionado con el asesinato de Edgar Hernández Corzo, brigadista del Partido Acción Nacional (PAN), quien murió a consecuencia de un disparo en la cabeza que recibió cuando regresaba de pegar propaganda electoral en el municipio de Guadalupe Victoria, según la policía sectorial.
Luego de los señalamientos de familiares y acompañantes de la víctima al momento de los hechos, las autoridades estatales iniciaron una investigación contra Grajales Niño, quien era postulado por el PRI para contender por la alcaldía de Villaflores.
Después de reportarse el homicidio, la dirigencia estatal del partido le retiró este lunes la candidatura a Grajales, acción que fue respaldada por el Comité Ejecutivo Nacional del PRI.
Tanto la candidata del PAN, Josefina Vázquez Mota, como la dirigencia de su partido condenaron el hecho y exigieron que no quedara impune.
Según las primeras indagatorias, la PGJE determinó que el excandidato no fue quien atentó contra el brigadista, aunque comprobó que sí estuvo presente en el momento que Hernández Corzo fue privado de la vida.
El argumento para señalar que el exabanderado del PRI no fue quien disparó se fundó en el resultado negativo en la prueba de rodizonato de sodio, mientras que su escolta, Alfonso López Moreno, dio positivo.
Ambos quedaron detenidos y procesados, en el marco de la averiguación previa número 182/CE39/2012 iniciada por el delito de homicidio calificado, y podrían alcanzar una condena de entre 25 hasta 50 años de prisión.
Familiares y amigos del Hernández Corzo, quienes acudieron este martes al sepelio, acusaron de la agresión a Grajales Niño.
Las versiones preliminares señalan que la víctima iba a bordo de una camioneta en compañía de Manuel Corzo Rojas y Alberto Morales Pérez. Cuando se dirigían al municipio de Villaflores, se encontraron con una camioneta negra y un automóvil gris, desde los cuales les dispararon cuando pasaban por las instalaciones de la Universidad Autónoma de Chiapas.
De acuerdo con los acompañantes de Edgar Hernández, Grajales Niño estuvo presente cuando ocurrió el homicidio del joven encargado de distribuir publicidad del PAN, y los persiguió hasta el rancho de la familia de uno de ellos, en donde intentaban refugiarse de los disparos que provenían de los vehículos en los que viajaban el excandidato y su escolta.
Uno de ellos refiere que aun cuando Hernández ya había muerto, Grajales Niño los alcanzó y lo “encañonó”, amenazándolo de muerte en presencia de sus familiares.
Este martes, durante el sepelio de Hernández, su padre, Hilario Hernández Santiago, dijo que el joven, de 33 años, quedó huérfano de madre cuando tenía 2 años, y que estudió hasta segundo grado de bachillerato. “Estaba muy emocionado con conseguir un empleo fijo porque ya tenía planes de boda con su novia”.
“Pido que se aplique todo el peso de la ley para mitigar un poco este dolor, le pido al gobernador que me ayude. Que nos devuelva un poco de confianza, que no se encubra a nadie por ser gente rica o de poder”, dijo.