El priista Antonio Tarín logra recurso para evitar arresto y sale de San Lázaro
Después de permanecer varias horas atrincherado en la Cámara de Diputados, el priista Antonio Enrique Tarín García salió del lugar este miércoles y está en libertad, gracias a que obtuvo una suspensión provisional para frenar la orden de aprehensión en su contra, solicitada por las autoridades de Chihuahua bajo el argumento de que cometió peculado cuando fue funcionario de la administración de César Duarte (2010-2016).
El recurso legal le fue concedido mientras se encontraba resguardado en el Palacio Legislativo de San Lázaro, donde este martes quiso rendir protesta ante el pleno como legislador federal. Sin embargo, el órgano le negó esa posibilidad, ante lo que él decidió permanecer en el complejo para definir su estrategia jurídica.
La suspensión provisional fue emitida alrededor del mediodía —según reportaron medios locales— y horas más tarde el documento llegó a la Cámara de Diputados. Ya con el papel en sus manos, Tarín salió del restaurante interno en el que había permanecido en compañía de su equipo y anunció que se retiraría del lugar.
"Tenemos un amparo (suspensión provisional). Con esto, me retiro yo a unas oficinas para seguir trabajando en mi defensa jurídica (...) Yo entré por mi propio pie al recinto, a San Lázaro, y me voy igual. No tememos absolutamente de nada y vamos a afrontar con la frente en alto todo este proceso que viene", dijo en un breve mensaje a medios.
"Espero estar muy pronto aquí con ustedes, de nuevo para la toma de protesta (...) Yo estoy en todo mi derecho de toma de protesta como diputado, pero primero hay que aclarar las cosas para venir cumpliendo con la ciudadanía", concluyó.
Tarín dejó San Lázaro en una camioneta gris en la que lo acompañó su personal de seguridad. Afuera, agentes ministeriales de Chihuahua y de la Ciudad de México lo detuvieron durante algunos minutos para notificarle de la orden de aprehensión en su contra y revisar la suspensión provisional a su favor. Luego de validar el documento, lo dejaron ir.
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Las acusaciones contra Tarín fueron dadas a conocer este martes por el actual gobierno de Chihuahua, a cargo del panista Javier Corral, quien incluso había pedido a la Cámara baja permitir la entrada de agentes para detener al exfuncionario.
Antes de que Tarín recibiera su suspensión provisional y dejara el recinto legislativo, el fiscal general del estado, César Augusto Peniche —quien había acudido al sitio este miércoles para reunirse con legisladores—, dijo a medios que la fiscalía todavía puede hacer que Tarín comparezca.
“La vamos a revisar (la decisión) y todo lo que tengamos que hacer legalmente lo vamos a hacer, aquí el objetivo fundamental es que (responda) el que tenga que responder ante la autoridad”, señaló el funcionario.
Tarín, quien fue director de Adquisiciones en la gestión de César Duarte, es uno de los cinco exfuncionarios chihuahuenses acusados de participar en una red de corrupción. Otro es el propio exgobernador y los tres restantes ya fueron detenidos.
Al círculo de Duarte se le atribuyen hechos como la venta irregular de propiedades del estado y favorecer a un banco del que el mismo exmandatario estatal era accionista. El gobernador Corral asegura que su antecesor ya huyó a El Paso, Texas, y advierte que pedirá la colaboración de las autoridades de EU para que sea detenido y enviado a México.