Publicidad
Publicidad

OPINIÓN: El Partido del Té puede llevar al Partido Republicano al desastre

Una encuesta muestra que el 50% de los republicanos coincide con el Partido del Té y el otro 50% se mantiene al margen o expresa hostilidad
mar 08 noviembre 2011 08:14 AM
Mitt Romney
Mitt Romney Mitt Romney

Nota del editor: David Frum, colaborador de CNN, fue asistente especial del presidente George W. Bush del 2001 al 2002. Él es autor de seis libros, incluyendo "Comeback: Conservatism That Can Win Again", y es el editor de FrumForum.

WASHINGTON (CNN) – Una nueva encuesta de CNN revela que alrededor de la mitad de los republicanos simpatizan con el movimiento del Partido del Té. La otra mitad o se mantiene al margen o expresa hostilidad (5%).

Ese segundo grupo de republicanos ha recibido muy poca atención mediática en este ciclo. Sin embargo, su hombre – Mitt Romney- se ha mantenido firme en el primer o segundo lugar en los últimos tres años . Mientras tanto, los republicanos del Partido del Té han pasado de Sarah Palin, a Donald Trump, a Michele Bachmann, a Rick Perry y actualmente, a Herman Cain, pasmando a los medios cada que pierden su fe en un mesías y buscan a otro.

Sin embargo, tarde o temprano, los republicanos del Partido del Té deberán converger en una sola alternativa. Cuando lo hagan, le presentarán a los republicanos que no son partidarios del Partido del Té un preocupante menú de posibilidades.

Posibilidad 1: Romney es nominado, Romney es electo

Desde el punto de vista de los republicanos que no simpatizan con el Partido del Té, este es el resultado ideal para las elecciones del 2012. Pero también es un resultado que se ve preocupantemente fuera de alcance. Mientras entramos a los últimos 12 meses de la elección, Romney aún no puede superar el 30% de apoyo en su propio partido. Peor aún, aunque es fácil imaginar, digamos, a los partidarios de Herman Cain cambiarse a favor de Rick Perry o viceversa, es muy complicado imaginarse en dónde encontrará Mitt Romney los votos adicionales republicanos que necesita.

Publicidad

Posibilidad 2: Romney es nominado, Romney pierde

Para los republicanos no simpatizantes del Partido del Té, este segundo escenario abre todo tipo de feas y siniestras posibilidades. Si Romney pierde, los republicanos del Partido del Té afirmarán que el Partido Republicano perdió porque no nominó a un “verdadero conservador”. Esa afirmación ignorará la lógica política (¿cómo un candidato más extremista ganaría más votos?), pero tendrá mucha efectividad emocional.

Militantes intensos siempre están listos para creer que la forma de ganar es ser más intensos y más partidistas. Las derrotas consecutivas con John McCain en el 2008 y Mitt Romney en el 2012 abrirán el camino para un candidato ultraconservador para 2016 –y una verdadera debacle para el partido.

Posibilidad 3: Un republicano del Partido del Té es nominado y pierde

Desde el punto de vista de un republicano no simpatizante del Partido del Té, la tercera posibilidad es el desperdicio más trágico. Una elección ganable será desperdiciada por una aventura ideológica. Sin embargo, dentro de este desastre puede merodear algo rescatable. Al menos el Partido Republicano se sacará la idea de una aventura ideológica.

Durante tres años, activistas republicanos han vivido en un mundo de fantasía donde personajes extremistas como Sarah Palin y Herman Cain de alguna manera “hablan por el sentido común de la gente común”. Parece increíble que alguien pudiera creer tal cosa. Sería una locura que alguien necesitara una elección presidencial para desengañarlos de tales nociones. Pero como dijera Benjamin Franklin: “La experiencia es un maestro más duro, pero los tontos no tendrá otro”.

Posibilidad 4: Un republicano del Partido del Té es nominado y gana

Esta posibilidad debe verse como la más remota. Pero no puede ser desacreditada y calificada como imposible, bajo dos condiciones:

Si la economía estadounidense sigue débil y enferma como ahora; y si los republicanos del Partido del Té cambian su apoyo al completamente inelegible Herman Cain a favor de Rick Perry , quien como gobernador de Texas tiene al menos credenciales para la presidencia. En ese escenario, quién sabe, todo puede pasar.

Perry sería un candidato mucho más débil que Romney, pero si los votantes están decididos a atacar al presidente actual, entonces quizá hasta un rival más débil podría triunfar. (Véase la candidatura de Barack Hussein Obama, 2008).

En este caso, no sólo los republicanos del Partido del Té, sino todos los republicanos todos los estadounidenses tendrían que enfrentar un problema: ¿Qué seguiría? El Partido del Té defiende una serie de propuestas que no se apegan a la realidad: que los déficits importan más que los empleos, que cortar déficits y apretar el crédito acelerará el crecimiento económico, que elevados impuestos y sobre regulación son las razones más importantes por las que el crecimiento no se ha disparado y que Estados Unidos aún ofrece las mejores oportunidades del mundo a los pobres para salir adelante.

El Partido del Té planea hacer un llamado para un cambio radical en la carga tributaria de los ricos a los pobres, y prometer grandes reducciones en el gasto gubernamental sin tocar ninguno de los beneficios para los retirados actuales.

Si esto se pone en práctica, la plataforma del Partido del Té es una fórmula para la crisis económica y política.

Afortunadamente, sigue siendo un escenario muy poco probable. Si le apuestan a las probabilidades, deberían poner su dinero a favor de la posibilidad 3. En cuanto a la posibilidad 1 –es simplemente buen gobierno. Y eso a nadie parece emocionarle demasiado en estos días.

 

Las opiniones expresadas en este comentario son únicamente las de David Frum.

Newsletter

Únete a nuestra comunidad. Te mandaremos una selección de nuestras historias.

Publicidad

Publicidad