OPINIÓN: Mujeres, es hora de impulsar al mundo
Nota del Editor: Christiane Amanpour es la presentadora del programa Amanpour, de CNN. Esta carta abierta es la primera de una serie de Cartas Abiertas a las Chicas del Mundo, como parte del proyecto Girl Rising. El especial Girl Rising, de CNN, proyectarà la historia de chicas extraordinarias y el poder de la educación para cambiar el mundo.
(CNN) — Queridas jóvenes del mundo,
Hay más de 7 mil millones de personas en el mundo. La mitad de ellas son mujeres y niñas. Imagine un mundo que crece, como sucederá, en donde todas las mujeres y las niñas estén empoderadas.
Esto tiene que comenzar por la educación. Todos los que se dedican a hacer proyecciones con números tienen razón en lo siguiente: Educación = empoderamiento, desde Estados Unidos hasta Uruguay y Ulan Bator.
Naciones Unidas, el Banco Mundial, y cualquier organismo en el que uno piense dice que una chica con educación es una chica que puede conseguir un empleo, que puede convertirse en sostén de familia y mejorar a sí misma, a su familia, a su poblado, a su comunidad y, finalmente, a todo su país. Todas las historias y las estadísticas demuestran que una sociedad sana es una en la que sus mujeres están sanas y son productivas.
Mire lo que las mujeres y las chicas logran en Ruanda, 19 años después del genocidio en ese lugar. El país encabeza a África en todos los sentidos: educación, salud, economía, medio ambiente y en política electoral, impulsado por la fuerza de sus mujeres. Es una historia increíble. En contraste, el mundo árabe, el cual es muy rico en recursos naturales como el petróleo y gas, está muy por detrás en todos los indicadores de desarrollo, debido a que a la mitad de su población, a sus mujeres, se les niega sus derechos básicos. Esta es la razón por la cual la Primavera Árabe debe liberar y empoderar plenamente a las mujeres, por el bien de aquellos países.
¿Sabía usted que si el empleo femenino estuviera a la par del empleo masculino en Estados Unidos, el PIB crecería un 5%? Y en países en desarrollo en los que la cifra está en dos dígitos sucedería lo mismo, como por ejemplo en Egipto, donde el PIB aumentaría 34% si las mujeres y los hombres tuvieran oportunidad de empleo similares.
Y aquí es donde entra la educación, ya que según un informe de Gene Sperling, el cual data de 2004 (ahora él es asesor económico de alto rango para el presidente Obama) por cada año adicional de educación primaria más allá del promedio, una mujer puede esperar un incremento de entre el 10 y el 20% en poder adquisitivo. Otro economista, Paul Schultz, halló un incremento de entre el 15 y el 25% de poder adquisitivo por cada año adicional de educación secundaria.
Así que hay que brindar educación a nuestras chicas si se quiere reducir la mortalidad infantil, estabilizar el crecimiento de la población y reducir los casos de VIH-SIDA.
En las zonas rurales, la ONU dice que los salarios, los ingresos por la agricultura y la productividad, mejoran cuando tienen educación las mujeres trabajadoras.
Es hora de terminar con la discriminación contra las niñas en el ámbito de la educación. Según la ONU, alrededor de 35 millones de niñas no están inscritas en la escuela primaria, y eso tiene que terminar.
Casi 800 millones de personas en el mundo son analfabetas, y dos tercios de ellas son mujeres y niñas. Imagine un mundo en el que ellas realmente supieran leer y escribir y realizar operaciones matemáticas básicas de contabilidad: así es como el mundo cambiará. Las mujeres son mucho más propensas que los hombres a utilizar sus ganancias para el bien de la familia, en vez de gastarlo en alcohol u otras cosas para sí mismas.
Cuestión de preguntarle al pionero de las microfinanzas, Muhammad Yunus, del Banco Grameen de Bangladesh: Las mujeres son la mejor apuesta. Préstales un poco y te pagarán con creces ¡Esto lo sabe desde hace 30 años!
¡Es tiempo de que el resto del mundo lo comprenda! ¡Vamos niñas! ¡Denle fuerza al mundo! Podemos hacerlo.
Las opiniones recogidas en este texto pertenecen exclusivamente a Christiane Amanpour.