(Expansión) - Siempre, de alguna forma y en todos los sexenios, la decisión de política monetaria tiene influencia del gobierno en turno. Sin embargo, que yo tenga conocimiento, nunca un presidente había adelantado o 'spoileado' la decisión de la junta de gobierno en la víspera.
Este hecho confirma que la banca central no es tan autónoma como presume, y que las filtraciones de información suceden.
El artículo 28 constitucional menciona la autonomía del banco central en sus funciones y administración, pero nada tan vago como ese texto.
Por ello, la filtración de la decisión de política monetaria me parece que es más una falta de profesionalismo por parte de quien lo hizo, y eso sí amerita una sanción en los términos que marca la ley del propio banco central.
El artículo 43 de la Ley del Banco de México establece las causas de la remoción de algún miembro de la junta de gobierno. En su inciso IV dice que son causas de remoción, “no cumplir los acuerdos de la Junta de Gobierno o actuar deliberadamente en exceso o defecto de sus atribuciones”. Y el inciso V menciona “utilizar, en beneficio propio o de terceros, la información confidencial de que disponga en razón de su cargo, así como divulgar la mencionada información sin la autorización de la Junta de Gobierno”.
Más claro ni el agua, quien haya filtrado esta información debió consensuarlo con la junta de gobierno previamente. De no haberlo hecho, debería responder en los términos que especifica la ley. Solo así Banxico podría confirmar su autonomía de gestión y recobrar la credibilidad tan desgastada que tiene.
En una empresa privada con políticas de ética y de gobierno corporativo bien definidas, este hecho ameritaría el despido.
Finalmente, algunos se harán la pregunta de qué papel juega el Ejecutivo en la banca central hoy en día. ¿Es un asesor? ¿Decide la política monetaria? ¿Solo le comparten la decisión?
Considero que no solo en este sexenio, sino en todos, hay una fuerte influencia y presión por parte del Ejecutivo para acomodar las decisiones de política monetaria a la política económica del gobierno en turno, pero, no más que eso. Al menos, no hay evidencia concluyente.
De cualquier manera, la consecuencia la paga Banxico y su junta de gobierno, que, por cierto, es la menos efectiva, técnica y profesional desde que tengo memoria.
La menos profesional, porque no son expertos en el ramo monetario, sino que vienen de otros lugares y experiencias. La menos técnica, por los errores de apreciación de la inflación. Y en términos de efectividad, porque desde el año 2018 esta junta de gobierno solo ha llegado seis meses al objetivo puntual de inflación de 3%, o menos; es decir, un 12% de efectividad, apenas.
A mi parecer, la misión de varios de sus integrantes es más el cuidar su chamba que cumplir con su mandato constitucional.
Nota del editor: Iván Franco es fundador y director de la consultora de inteligencia competitiva Triplethree International. Síguelo en Twitter y en LinkedIn . Las opiniones expresadas en esta columna pertenecen exclusivamente al autor.
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