La pérdida de la biodiversidad está a punto de ser irreversible: estudio
La pérdida de biodiversidad se acerca "a un punto de no retorno" de mantenerse las actuales tendencias de consumo, lo que reducirá "de forma importante" la capacidad de los ecosistemas para ofrecer bienes y servicios esenciales para el bienestar humano.
Así lo sostienen los últimos estudios del Observatorio de la Sostenibilidad en España (OSE) en una nota con motivo de la celebración del Día Internacional de la Diversidad Biológica este domingo 22 de mayo.
Este año, las Naciones Unidas conmemoran la fecha bajo el lema Biodiversidad y Florestas , en el que junta dos de las principales preocupaciones medioambientales a nivel global.
El Día de la Biodiversidad se instituyó en el año 2000 para conmemorar la aprobación del Convenio sobre la Diversidad Biológica (22 de mayo de 1992) durante la Cumbre de la Tierra de Río de Janeiro.
El convenio, que entró en vigor en diciembre de 1993, define la biodiversidad como la variabilidad de organismos vivos de cualquier fuente, incluidos, entre otros, los ecosistemas terrestres y marinos, y los complejos procesos ecológicos de los que forman parte.
Y se estructura en torno a tres objetivos: la conservación de la diversidad biológica, el uso sostenible de sus componentes y la participación justa y equitativa de cada país respecto de los beneficios derivados del uso de los recursos genéticos.
De hecho, cerca del 75% de la biodiversidad del planeta se concentra en apenas 17 países, que no siempre son los que más se benefician de su riqueza.
México ocupa el quinto lugar en el listado del los países considerados como megadiversos por la variedad de especies que habitan en el territorio nacional, siendo Brasil el país con mayor diversidad. En total, se incluyen seis países de América Latina entre los 10 países megadiversos del planeta.
Por otro lado, la ciudad japonesa de Nagoya acogió en octubre de 2010 la décima Conferencia de las Partes de la Convención sobre Biodiversidad , en la que 193 países acordaron cuotas de protección del 17% de la superficie terrestre y del 10% de las marinas.
Además de adoptarse nuevas metas de financiación para el 2012, la cumbre elaboró un protocolo sobre recursos genéticos, el caballo de batalla de los países latinoamericanos, para el uso y distribución equitativa de los beneficios derivados de los recursos genéticos.
México, a través de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), firmó el Tratado de Nagoya a finales del pasado febrero para “proteger la biodiversidad y proveer de compensaciones económicas y de desarrollo a las comunidades originarias y rurales generadoras del conocimiento en el uso y aprovechamiento de la flora y fauna del país”, dijo la dependencia en un comunicado.
Además, el 80% del territorio mexicano es propiedad de comunidades rurales y ejidos, que serán los principales beneficiarios del protocolo, pues evitará la biopiratería y el uso indebido de recursos, añade la Semarnat.
Pese a los esfuerzos, los últimos informes del Observatorio de la Sostenibilidad constatan que el agua dulce, las materias primas, medicinas y alimentos "desaparecerán o se reducirán drásticamente, y con costes muy altos para la sociedad, si no se mantiene la integridad y el funcionamiento de los ecosistemas a nivel global".
De ahí la importancia, dice el Observatorio, de que el hombre sea consciente de que forma parte de la biodiversidad y que su vida depende de cómo se relaciona con ella.
"La OSE trabaja para que el camino hacia ése reto sea más fácil", concluye.