OPINIÓN: Juan Zepeda demostró su cercanía con la gente y que puede ganar
Nota del editor: Osmar Pedro León es exsecretario del PRD en el Estado de México e integrante del equipo de campaña del candidato perredista. Las opiniones en esta columna pertenecen exclusivamente al autor. Grupo Expansión invitó a los equipos de los cuatro candidatos punteros a opinar sobre el desempeño de sus abanderados en el debate de este martes.
(Expansión) - "Más vale el 10% de algo que el 100% de nada", dice un refrán mexicano. Sin llegar al conformismo democrático, el debate que sostuvieron los candidatos a la gubernatura del Estado de México anoche en las instalaciones de Instituto Electoral de nuestro estado (IEEM), con 135 minutos efectivos de acción y la bien lograda conducción de la internacionalista Rina Mussali, amplía nuestra opinión.
Sin embargo, el formato debe cambiar. No se puede en un lapso tan corto, ni con tantos candidatos, tener una metodología acartonada que le impide al elector conocer más de los candidatos y sus propuestas. Los monólogos hacia las cámaras convierten este ejercicio en un programa aburrido y falto de expectativas. Fue esto lo que motivó al candidato del PRD, Juan Zepeda, a proponer un cambio de formato que no fue aceptado por el resto de los partidos.
A pesar de ello, su capacidad de comunicar con un lenguaje sencillo y conectar con la audiencia en tan poco tiempo hizo ver a Juan Zepeda superior al resto de sus contendientes. Vestido de manera sencilla, con un lenguaje corporal que a ratos lo hacía ver contento, asimismo la sinceridad y elocuencia de sus palabras, nos dejan ver a un hombre común, uno de los nuestros, alguien del pueblo que compite por el cargo de gobierno más importante en el Estado de México.
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Ya entrando en el primer tema, la economía, Juan Zepeda dijo "el gobierno no crea empleos", pero sí se comprometió a cuidar y fomentar la inversión empresarial como motor de la generación de empleos; ahí alude a los empresarios y a los trabajadores para cuidarlos y evitar robos, extorsiones y secuestros. "Que nadie me los moleste para que podamos tener más empleos", nos dice.
Enfundado en el conocimiento que tiene del estado que pretende gobernar, propone como usuario del transporte público dos líneas más del Metro. "No más, porque decir más sería mentir", nos aclara. También, 10 líneas más del Mexibús para garantizar una red de movilidad que permita a los mexiquenses ahorrar tiempo y dinero, porque 30% del gasto se va en pasajes. Al mismo tiempo, reconoció la responsabilidad que todos tenemos en mayor o menor grado por el deterioro ambiental y la urgencia de tratarlo con políticas públicas eficientes y de la mano del ejercicio real de la legislación que vela por la naturaleza en todos sus aspectos.
Como beneficiario de la educación pública, propone la creación de una verdadera reforma educativa estatal de la mano de los maestros. Así como un incremento de 1,000 millones de pesos anuales al presupuesto de la UAEM para crear 10 campus universitarios más, la creación de 50 nuevas preparatorias por toda la entidad y adoptar el programa Prepa SÍ como un incentivo que combata la deserción escolar.
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En tanto que en materia de salud, evidenció la falta de conocimiento de la realidad que tiene Alfredo del Mazo —quien habla bien de la gestión del actual gobierno—, pues señaló que no sabe lo que es estar en Urgencias y ser atendido en pasillos sobre cartones en el suelo por no contar con camas suficientes; por ello es necesario incrementar y mejorar la infraestructura hospitalaria, más equipamiento y capacitación con un trato digno para los trabajadores del sistema de salud, sin soslayar el adecuado abasto de medicamentos.
Para cerrar, reconoció que se mantendrá muy de cerca a los pueblos originarios, pues ellos son parte importante del estado, y llamó a votar por la propuesta que él encabeza, a votar por el PRD. Sin duda, ya es evidente el resurgimiento del PRD; y sin duda, haber optado por un candidato de la cantera perredista, como él mismo se describe, es clara muestra de que el PRD ha entendido que para el ejercicio de gobierno se requiere de nuevos actores, con nuevas propuestas, con perfiles diferentes, con prácticas distintas y con las características más nobles del ser humano. Por supuesto que así es posible ganar .
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