¿Quieres tener los ojos como los de Lady Gaga? Los gurús te dicen cómo

La música tecno retumba al fondo, pero la voz de Michelle Phan es un contraste, como una suave canción de cuna. En precisamente 7 minutos y 33 segundos, si sigues las meticulosas instrucciones de Phan, ella te puede transformar en la Lady Gaga de ojos gigantes del video Bad Romance .
Casi un millón de personas han visto este tutorial producido por Phan. Algunas tratan de emular los ojos dramáticos de Lady Gaga logrados con delineador blanco y pestañas onduladas. Otros dan click al video sólo para ver a Phan, una sensación de la moda que ha conseguido la corona de la estilista de belleza número uno en YouTube.
“Me encanta que una cosa pueda transformar la cara” dijo Phan, que vive en Los Ángeles, California. “Soy una artista, así que me encanta la forma en que un solo medio puede transformar un lienzo. El delineador realmente puede hacer el ojo de una mujer más acentuado. Un labial rojo puede hacer a una mujer verse más sexy”.
Fuentes de YouTube estiman que hay cientos de miles de tutoriales de belleza del tipo hazlo tu mismo en su sitio desde que inició labores en 2005. La compañía dice que esos videos de belleza son revolucionarios en muchas formas: conectan a millones de usuarios, redefinen el rol de los medios sociales u cambian la forma en que algunos estilistas novatos lanzan sus carreras.
“YouTube se ha vuelto una enciclopedia de videos de maquillaje” dice Sadia Harper, reponsable de supervisar los videos de belleza y los de tipo cómo hacer en la red social de videos.
Con sólo 23 años, la popularidad de Phan en YouTube le ha dado incluso un trabajo como representante del gigante de belleza Lancôme. Antes de que sus videos debutaran, Phan recuerda haber aplicado para un puesto de ventas en un mostrador de maquillaje de Lancôme en Florida en 2007.
Le dijeron que no tenía suficiente experiencia.
Después del rechazo, Phan volvió a su departamento universitario, en donde nació su primer video estilista de hazlo tu mismo. Ella usó una relativamente simple combinación de su Macbook Pro y los programas básicos de edición de video. Phan aparece en todos sus videos como instructora: una mujer joven pequeña, de voz suave, con un rostro versátil que sin mucho esfuerzo logra un amplio rango de looks que ella misma enseña.
“Me apasiona mucho el maquillaje, y no debería dejar que nadie que me haya dicho ‘no’ me impida alcanzar mis sueños”, dice. “Pensé: ¿qué tengo que perder? Era en unas vacaciones de verano, y no tenía empleo”.
Tres años más tarde tiene cerca de 100 videos en su canal MichellePhan. Son detalladamente documentados, muy fáciles de buscar y la mejor parte: son gratis.
El público puede aprender a tener ojos seductores o mejillas que provoquen besos. Pueden incluso copiar el look Avatar usando sombras azules y lavandas en los ojos. Si parece difícil, no se preocupen. Phan los guía en todo el proceso, paso a paso.
En promedio, ella recibe cerca de un millón de reproducciones por cada video.
“En estos días, los medios sociales son un lugar muy importante para la expresión personal de la imagen corporal y para la circulación de nuevas ideas de lo que puede ser hecho con el cuerpo”, dice Victoria Pitts-Taylor, una profesora de sociología en la Universidad City de Nueva York. Ella ha estudiado cómo las personas piensan sobre sus cuerpos y sobre la web.
Similar a blogs exitosos sobre cocina, comida o decoración de interiores, los videos de YouTube de consejos de estilo y maquillaje pueden ser una forma en que los profesionales, especialmente mujeres, desarrollen sus habilidades empresariales, dice Pitts-Taylor.
Samantha Maria, que no quiso dar su apellido por privacidad, es una aspirante a estilista que espera que sus videos le ayuden a fortalecer su carrera en el mundo de la belleza. Mejor conocida como BeautyCrush en YouTube, se considera una estudiante común y corriente de 20 años que estudia en Southampton, Inglaterra.
Sus videos de belleza y maquillaje están inspirados por lo que ella ve en las calles, dice. Con su encantador acento británico, narra docenas de videos. Dice que una vez fue reconocida por una extraña que veía sus videos.
“Estaba muy asombrada, pero fue genial pues la chica fue muy amable”, dice. “Comenté sobre ella en un video porque todavía estaba muy emocionada por eso”.
Y ahora no hay sólo tutoriales de cómo hacer de maquillaje que han ganado la atención de miles de personas.
Patricia Otegwu se especializa en pelo y moda en su canal BritPopPrincess. Ella es una chica de 23 años de sonrisa afable, que vive en la casa de sus padres en Londres. Tuvo dificultad para encontrar empleo debido a la crisis económica, así que sigue con su empresa de video esperando que le ayuden a lanzar sus propios productos para el pelo.
“Es una experiencia excitante pero sobrecogedora” dice Otegwu.
Jonah Bergerm profesor adjunto de mercadeo en la Escuela Wharton en la Universidad de Pennsylvania, dice que los medios sociales pueden ser una manera creativa y prometedora de lanzar una carrera.
“Antes de los medios sociales, o trabajabas en las empresas y ascendías en rangos o tenías que conocer a la gente adecuada”, dice Berger. “Los medios sociales democratizaron el progreso en cierto grado”.
Pero Berger señala la mayoría de estilistas autodidactas no se vuelven famosos.
Para Michelle Phan, destacarse del grupo en la web no ha sido un problema.
Phan se ríe cuando habla sobre cómo su madre quería que ella fuera médica, por el salario lucrativo. Pero Phan le dijo a su madre que ella prefería seguir su pasión por el maquillaje. Ahora sus videos y su línea de cuidado de piel le permiten sostener financieramente a su madre y a sus hermanos.
A pesar de su fama de Internet, ella todavía encuentra tiempo para conectarse con sus fanáticos. Tiene páginas de Twitter y Facebook, en las que le responde a tantos seguidores como puede cada día.
“Michelle, eres una artista asombrosa, me has inspirado en muchas formas, a ser más creativa en todo. Gracias por todo :) xx”, escribe la usuaria de Facebook Becky Wyburn en el muro de Phan.
En ocasiones los comentarios no son tan amables, pero Phan, como muchos estilistas en línea, han aprendido a recibir lo bueno y lo malo.
“Es como el arte”, dice. “Por supuesto que a todo el mundo no le va gustar la pintura de Picasso, pero al final del día, yo sé me esforcé mucho en el proceso”.