Los correos electrónicos no deseados o spam constituyen diariamente una molestia para los millones de internautas que ven los buzones de correo electrónico llenos de ellos, de acuerdo con expertos.
Un estudio de la firma de seguridad McAfee asegura que durante el 2008 se enviaron
, mientras que Prodigy afirma que diariamente se reciben 4 millones 888,072 correos no deseados en México.
¿Qué pueden hacer los usuarios al respecto?
El spam como tal no se encuentra estipulado como delito en ninguna de las leyes mexicanas hasta el momento, de acuerdo con el portal
, así como con la página , por lo que los usuarios no pueden evitar que este tipo de correos sigan llegando a sus buzones.
Sin embargo, la transmisión de los datos de los usuarios a estas bases de envío constituyen una violación a la
, en su capítulo VIII, artículo 76 BIS ya que rompen el acuerdo entre el usuario y los proveedores.
El artículo 76 BIS establece además que el proveedor tiene prohibido difundir la información a otros proveedores ajenos a la transacción, a menos que el propio consumidor lo apruebe y que deberá brindar seguridad y confidencialidad sobre los datos proporcionados.
Por otro lado, en el mismo artículo se establece que "el proveedor respetará la decisión del consumidor en cuanto a la cantidad y calidad de los productos que desea recibir, así como la de no recibir avisos comerciales".
En caso de que como usuario compruebes que tus datos fueron traspasados por un proveedor, o que dicho proveedor continúa mandando avisos comerciales se puede acudir ante la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) para levantar una denuncia a través del número de teléfono 01-800-468-8722 o a través de su portal de Internet
.
El portal A.S.I indica que si el correo fue enviado por entidades extranjeras, entonces se puede denunciar a través de la página
dentro de la sección "Make a report".