Ante el flujo creciente de datos en la web, México mantiene velocidades limitadas de conexión de un promedio de 2.64 Megabytes por segundo (Mbps), que contrastan frente a las de Corea del Sur, de hasta 35 Mbps.
"Los servicios de Internet de ultra rápida velocidad (en México) serán sólo para sectores de nicho, empresas o aquellos que tengan una solvencia económica muy alta y que en verdad necesiten esa tecnología", dijo en entrevista el director de la consultoría The Competitive Intelligence Unit (CIU), Ernesto Piedras.
La empresa mexicana de telecomunicaciones Axtel anunció este martes que ofrecerá servicios de conexión a
en las poblaciones de Guadalajara, Monterrey y Ciudad de México.Los precios por acceder a la banda ancha ultra rápida (con velocidad similar tanto para descargar como para subir datos) van de los 1,649 pesos por 10 Mbps hasta los 8,249 pesos por 100 Mbps de velocidad. Todos los paquetes incluyen una línea telefónica con llamadas locales ilimitadas.
"El servicio (conexión web ultra rápida) irá a un segmento de la población limitado por lo que su captación de clientes no se verá con grandes cambios, en su mayoría las empresas serán las que quizá puedan solventar esos gastos", aseguró el analista de telecomunicaciones de Grupo Financiero Ixe, Manuel Jiménez.
Servicios similares de
que en el caso de Cablevisión incluyen el servicio de telefonía y televisión por cable.Axtel cuenta con el 5% del mercado de líneas telefónicas instaladas y un 3% de los servicios de Internet de alta velocidad en México.
"Los servicios de ultra rápida velocidad tardarán bastante tiempo en masificarse en la población debido al costo que tienen y a la gran inversión para las empresas que implica poner la fibra óptica hasta el hogar", explicó el analista del sector de la casa de bolsa Itaú Securities, Martín Lara.
En México, más de 31 millones de personas cuentan con servicios de conexión a Internet, frente a los 28 millones que contaban con ese servicio el año pasado, según datos de la Asociación Mexicana de Internet (AMIPCI).
"Hay que señalar que estos servicios se enfocan a extenso tráfico de datos de tipo audio visual en alta definición; sin embargo, el que por ahora no haya tantos contenidos o demanda no significa que no se utilizarían", puntualizó el analista del CIU, Diego Gamboa.