Nanotecnología y 'bolsas de té' podrán convertir el agua en potable
La falta de acceso al agua potable sigue siendo un problema para millones de personas en todo el mundo , pero nuevos desarrollos en la nanotecnología y un filtro de agua que se asemeja a una simple bolsa de té podrían ser soluciones efectivas.
El filtro de la ‘bolsa de té’ es la creación del profesor Cloete, de la Universidad de Stellenbosch. Está diseñado para caber en el cuello de una botella de agua convencional, es decir, es intercambiable, y dependiendo de la calidad del agua que se filtra, el costo es de entre uno y cinco centavos de dólar por litro.
“La forma más simple de visualizar nuestro filtro es pensar en una bolsa de té normal”, dice Cloete. “La parte exterior de la bolsa está cubierta por un polímero que incluye un biocida , es decir, filtra el agua y mata las bacterias. Aún no nos enfrentamos a una bacteria que no pueda matar ”.
“El interior (el té, por así decirlo) está hecho de carbono activado , y éste puede remover contaminantes químicos . Es fácil de recordar: una bolsa, un litro”.
Las bolsas son desechables y completamente biodegradables, según Cloete, y además el carbono activado por dentro es un buen acondicionador de suelo. Cloete agregó que toda la tecnología tiene limitantes. “Yo no bebería aguas residuales de ahí, pero si tomas agua muy contaminada, con un millón de bacterias por mililitro, se reducirá a menos de diez. No podrás encontrarlas después de que pase por el filtro”.
El profesor Cloete está trabajando con fabricantes de máquinas en República Checa, y espera tener una versión masiva disponible para febrero de 2011 .
Dice que ya está ‘inundado’ de solicitudes por parte de ONG para distribuir bolsas de té en varias zonas del mundo . Según la Organización Mundial de la Salud de la ONU, la falta de agua limpia y las condiciones de salubridad insatisfactorias matan a 1.6 millones de niños cada año .
“La tecnología del filtro de la bolsa de té suena bien, sobre todo desde el punto de vista de ser un proceso de un solo paso, pues no se tiene que hacer ninguna mezcla”, dijo Nega Bazezew Legesse de Oxfam.”Una posible limitante es que sólo se usa una vez para producir un litro de agua bebible. Es difícil responder cuántas bolsas de té necesitará una familia al día, pues tiene que ser muy, muy barato”.
Aunque incluso el bajo costo pueda ser un problema para quienes viven con un dólar al día o menos, el profesor Cloete cree que un pequeño costo en las ventas en occidente podría ayudar a subsidiar los costos en el mundo en vías de desarrollo .
“La mayor parte de los recursos pueden patrocinar a quienes menos tienen, y si esta gente paga podría marcar una gran diferencia para millones ”, dijo.
La bolsa de té no es la única tecnología interesante a futuro, y los investigadores en California están desarrollando un filtro que emplea nanotecnología y plata para producir agua limpia. Funciona con una malla creada con una combinación de cilindros pequeños de carbono, conocidos como nanotubos, y cable de plata. Se sabe que la plata mata las bacterias, pero sumando una corriente eléctrica el proceso es más efectivo, pues aniquila hasta el 98% de las bacterias.
“La concentración de bacterias después de la filtración depende de la concentración inicial de bacterias en el agua”, dijo el desarrollador, el Dr. Cui, de la Universidad de Stanford.
“Si la concentración inicial es muy alta, se deberá filtrar más veces usando el dispositivo que tenemos. Estamos intentando optimizar nuestro filtro para hacerlo más efectivo, y quizás después de una sola filtración podremos obtener agua segura ”.
Aunque aún no hay una versión comercial, el Dr. Cui cree que podría haber una versión masiva para que esta tecnología esté disponible y pueda comercializarse. “Será costeable para la gente en países en vías de desarrollo, y si consideramos el costo, debemos considerar también el tiempo de vida del aparato. No es un gasto de una sola vez porque el filtro es reusable”.
La energía necesaria para utilizar el filtro puede provenir de cualquier aparato que produzca 20 voltios, como un panel solar pequeño. El Dr. Cui espera que en el futuro sólo se necesiten 9 voltios.
Para Legesse, la ventaja principal con las soluciones de nanotecnología es que son costeables y pueden ser imitadas a bajo costo en los países en vías de desarrollo.
“Pero sentimos que estas innovaciones marcarán la diferencia en nuestro intento por ofrecer agua potable en nuestros programas, y nos gustaría ver un resultado exitoso a partir de nuestro trabajo de investigación”, dijo.