Un 'marsonauta' se ‘lastima’ en una expedición simulada a Marte
Durante la última caminata del simulacro de vuelo a Marte uno de los voluntarios sufrió una lesión mientras caminaba por la superficie del Planeta Rojo.
A las 09.59 GMT, Alexandr Smoléyevski y Diego Urbina abrieron las escotillas de su cápsula espacial y salieron a recorrer Marte.
Los astronautas tenían una misión: desprender dos trozos de roca con ayuda de un pico y un taladro para tomar muestras del suelo .
De regreso a la cápsula, ya los esperaba el atronauta chino Wang Yue, quien participó junto a Smoléyevski en la anterior caminata, realizada el pasado viernes.
Pero mientras regresaba, el astronauta ítalo-colombiano tropezó con una piedra, se cayó de costado y se lesionó. Su compañero le ayudó a levantarse y a recoger la bolsa con las muestras de roca y lo acompañó.
Lesión y caminata habían sido planeadas por la Agencia Espacial Europea y el Instituto de Problemas Biomédicos de Rusia como parte del experimento que intenta recrear la experiencia de una misión tripulada a Marte.
Igual que en las dos salidas extravehiculares anteriores, en esta caminata, que duró tres cuartos de hora, los voluntarios vistieron trajes rusos Orlán-M especialmente modificadas para el experimento, ya que, con sus 32 kilos, son el triple de ligeras que las que utilizan los cosmonautas en el espacio.
Los tres voluntarios regresarán mañana a la órbita marciana a bordo del módulo de descenso, que 24 horas más tarde se acoplará de nuevo a la nave espacial.
No obstante, deberán pasar una cuarentena de tres días antes de poder abrir las escotillas y acceder de nuevo al interior del laboratorio que simula la nave.
Allí serán recibidos por los otros tres participantes del experimento Marte-500, los rusos Alexéi Sitev y Sujrob Kamólov y el francés Romain Charles, que han permanecido en la órbita marciana, desde que ingresaron el pasado 1 de febrero.
Este experimento, que comenzó el 3 de junio de 2010, sirve para estudiar la compatibilidad psicológica y la tolerancia de los miembros de una tripulación durante un vuelo interplanetario.
Sus participantes compartirán durante un total de un año y poco más de cinco meses los 550 metros cúbicos que suman los cuatro módulos cilíndricos que conforman el simulador, ubicado en el recinto del IPBM.
Permanecerán aislados del mundo exactamente el tiempo que lleva el vuelo de ida y vuelta a Marte, 490 días, más otros 30 de estancia simulada en el Planeta Rojo.
La Agencia Espacial Europea (ESA) y la rusa Roscosmos lanzaron en 2004 este ambicioso proyecto, al que se sumó posteriormente China y en el que también colaboran países como Estados Unidos y España.
En noviembre de 2007 se realizó un primer experimento preparatorio en el que seis voluntarios rusos permanecieron aislados del exterior durante dos semanas, mientras que en julio del año pasado se llevó a cabo un simulacro de vuelo al Planeta Rojo de 105 días.