Más allá de su salud, Steve Jobs sigue siendo un gran vendedor
Seis semanas después de anunciar una licencia médica indefinida , el presidente ejecutivo de Apple, Steve Jobs, sorprendió a mucha gente cuando subió al estrado el miércoles para revelar la nueva generación de la iPad .
La audiencia en el evento de Apple le dio una ovación de pie y los blogueros de tecnología inmediatamente tuitearon la noticia. "El hecho de que haya salido al estrado pasará a la historia como un hecho importante", expresó John Jackson, un analista interno de CBS. "Es un gesto significativo".
Jobs fue diagnosticado con cáncer pancreático en 2003 y pasó por un trasplante de hígado en 2009. El 17 de enero, tomó su segunda ausencia de la compañía en los últimos dos años.
La especulación acerca de la salud de Jobs ha aumentado en las semanas recientes; los tabloides han publicado reportes sin fundamentos. Algunos de esos rumores fueron calmados cuando Jobs fue fotografiado en febrero en una cena privada con el presidente estadounidense Barack Obama y otros miembros de la élite de Silicon Valley, sede de varias empresas de tecnología.
De cualquier modo, muchos observadores habían esperado que otro ejecutivo de Apple, posiblemente el jefe de operaciones Tim Cook o el jefe de mercadotecnia Phil Schiller, sustituyeran a Jobs este miércoles.
Pero ahí estaba Jobs, luciendo delgado pero feliz y vigoroso . Cualquiera que sean los problemas de salud que lo llevaron a pedir una ausencia, no parecen afectar su habilidad para promocionar un producto.
“Hemos estado trabajando en este producto desde hace mucho, y simplemente no quería perderme este día”, dijo Jobs.
A lo largo de su presentación sonrió a menudo, caminó de un lado al otro del escenario e hizo bromas acerca del iPhone blanco que aún no vende Apple. También provocó un poco, como es su costumbre, a competidores como Google: dijo que las tabletas Android carecían de suficientes aplicaciones .
En esta ocasión Jobs no salió a la sala de demostraciones, donde en previas ocasiones saludaba a los reporteros e invitados que dan un primer vistazo a los nuevos productos.
Varios observadores notaron que Jobs agregó un cinturón negro a su característico atuendo de jeans y playera negra de cuello de tortuga. ¿Jobs era un ninja o un hombre usando pantalones que le quedan grandes?, especularon.
La actual ausencia del cofundador de Apple ha provocado preocupaciones entre sus seguidores, parecidos a un culto , e incluso ha espantado a algunos inversionistas. Una propuesta para Apple de esbozar un plan de sucesión para sus ejecutivos no logró ser aprobada en la reunión de accionistas de la compañía en la sede de la firma en Cupertino, California, la semana pasada. Jobs no asistió a esa reunión.
Pero la salud del jefe de Apple, que dirige la compañía tecnológica mejor valuada en el mundo, es más importante para los accionistas que para la mayoría de los consumidores , dice Sarah Roman Epps, una analista de Forrester Research que se enfoca en computación personal.
“No creo que la persona común y corriente se preocupe acerca de lo que está pasando con el líder de Apple”, dijo.
La aparición de Jobs amenazó con eclipsar el lanzamiento de la iPad 2 y podría aliviar algunas críticas de que esta nueva versión de la tableta no es una gran actualización de la original .
Jobs concluyó la presentación con un toque de sentimentalismo, que además adornó su declaración de enero cuando anunció su ausencia médica.
“Como siempre, me gustaría agradecer a las familias de todos porque nos apoyan y nos permiten hacer lo que amamos hacer”, dijo.